Empresas y finanzas
El petróleo frena a los coches de empresa: las compañías animarán a sus empleados a usar el transporte público
El elevado precio del combustible ha motivado que las empresas se lo estén pensando mejor a la hora de gratificar a sus empleados con un vehículo. El sistema de retribucuión favorito para más de la mitad de las compañías españolas está empezando a ser demasiado caro y, como medida para reducir los costes de este sistema, van a empezar a promover el uso del transporte público.
Más medidas
Una de cada cuatro empresas españolas fomentará el uso del transporte público ante la subida del precio del petróleo, según un estudio realizado por el Observador del Vehículo de Empresa (CVO), promovido por la empresa de alquiler Arval, la filial de renting del banco francés BNP Paribas.
De acuerdo con el informe, realizado entre más de 4.000 gestores de pymes y grandes empresas, el 45% de las firmas se decantará por tratar de optimizar sus trayectos y tres de cada diez implantarán la conducción compartida en los próximos dos años. Otras de las opciones que se plantean son el teletrabajo y las videoconferencias.
Así, siete de cada diez empresas encuestadas, en especial las más grandes, aseguran que miden regularmente el consumo de carburante de sus vehículos, mientras que casi la mitad selecciona sus flotas de acuerdo a criterios medioambientales.
Seguridad vial
Otro de los factores que influye en el gasto provocado por los vehículos de empresa es la seguridad vial. Por ello, el 73% de las compañías reconoce haber promovido al menos una acción de seguridad vial, principalmente cursos de formación y sensibilización de los conductores.
Y es que para el 41% de las pequeñas y medianas empresas españolas es "primordial" reforzar su política de control de costes sobre sus flotas de vehículos durante los próximos dos años, según indica CVO.
De acuerdo con otro estudio reciente publicado por el Observatorio, el coche de empresa es el sistema de incentivos más habitual entre las empresas españolas como fórmula para recompensar a sus empleados a través de ventajas sociales o incentivos en especie adicionales al salario. Así, esta iniciativa ocupa el primer puesto dentro de las políticas retributivas del 52% de las empresas españolas.