Las exportaciones de aceite caen casi un 30% por la subida de los precios
- El mayor descenso está en el granel tras un encarecimiento del 52%
Javier Romera
La fuerte subida que han experimentado en el último año los precios del aceite de oliva en origen han pasado factura a las exportaciones españolas.
De acuerdo con los informes del Ministerio de Agricultura, con los datos facilitados por Aduanas y a falta tan sólo de las cifras del pasado mes de septiembre, España exportó 771.900 toneladas de aceite, lo que supone un 29% menos que un año antes, cuando se alcanzaron 1,1 millones de toneladas. Rafael Pico, director general de Asoliva, la Asociación de Exportadores de Aceite de Oliva Español, asegura que "nuestra previsión es cerrar el año con una caída del entorno del 26 al 27%".
La caída más fuerte, según explica, está en la venta de producto a granel. "Es un mercado que va a precio y cuando en España se encarece, los compradores se dirigen a otros países competidores, como pueden ser Túnez, Turquía o Marruecos", dice Pico. El mayor comprador de aceite español es Italia, que acapara el 45% de los envíos dentro de la Unión Europea. Grandes compradores son también, no obstante, otros países como Portugal y Estados Unidos, debido en este último caso al potencial de su industria conservera, que necesita el aceite para la elaboración de sus productos.
El envasado resiste mejor
El director general de Asoliva asegura que, frente a la fuerte caída registrada por el aceite a granel, el envasado está resistiendo mucho mejor. En este caso, nuestros mayores compradores son Estados Unidos, Australia, Francia, Reino Unido, Brasil, Rusia, China o Japón, entre otros. "La disminución de las ventas de aceite de oliva envasado han caído solo un 5% porque las empresas han preferido perder dinero a quedarse sin clientes y, o no han repercutido la subida de los precios, o lo han hecho tan sólo parcialmente".
El problema de fondo es que en tan sólo unos meses el precio del aceite de oliva en origen ha pasado de 2,8 euros por kilo a más de 4,25, lo que supone una subida del 52%. Desde la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac), se muestran no obstante optimistas y aseguran que "más que una comparación de las ventas con respecto al año pasado, que fue absolutamtente récord gracias a una gran campaña, hay que examinar tendencias y compararlo con otros años".
Anierac evita hablar de precios, pero reconoce que "la lluvia que está cayendo en septiembre es beneficiosa y se espera que haya a partir de este mes una buena campaña". De hecho, según los últimos datos recogidos por el Sistema de Información de Precios en Origen de la Fundación para la Promoción y el Desarrollo del Olivar y del Aceite de Oliva, el coste del aceite ha empezado a bajar y cerró la semana pasada en 3,5 euros por kilo.
La razón principal que explicaría está caída es que frente a esta campaña, que se cierra ahora, con una producción entorno a las 840.000 toneladas, la que está a punto de empezar podría alcanzar, según las previsiones que maneja el sector podría elevarse hasta 1,35 millones de toneladas, lo que implicará, lógicamente, una tendencia a la baja de los precios.
La caída de los precios tendrá un efecto inmediato sobre las exportaciones y se espera que también en las venta en el mercado interior. Desde el inicio de la última campaña, en octubre de 2014, hasta el pasado mes de julio, esas ventas se vinieron abajo cerca de un 6%. Entre enero y julio, las ventas del aceite cayeron y se desplomaron un 8,5%.