ACS, OHL y FCC ahora reniegan de las licitaciones a la baja

Defienden acabar con un modelo "insostenible" que despierta "sospechas de corrupción"

Sin medias tintas, los dirigentes de tres de las mayores constructoras españolas se desmarcaron ayer del modelo de licitaciones español del que se han alimentado durante tantos años. Ni al vicepresidente ejecutivo de ACS, Antonio García Ferrer, ni a los consejeros delegados de OHL, Josep Piqué, y FCC, Juan Béjar, les convence ahora un sistema en el que las bajas de precios en las ofertas y los posteriores modificados, con los sobrecostes que suelen generar, son el pan de cada día.

El modelo español propicia bajas del 50 por ciento respecto al precio presupuestado, advirtió García Ferrer en el V Foro de Infraestructuras organizado por KPMG. "Esto no es sostenible y tiene que desaparecer" porque si no lo acabarán haciendo las empresas, aseguró. Este sistema "es muy español y tiene que acabarse", sostuvo Béjar. "Nada que añadir", dijo Piqué.

Pero el exministro sí fue más allá, porque no dudó en lamentar que el modelo actual, con los habituales modificados y sobrecostes, haya "levantado sospechas de corrupción que no ayudan" a España. Eso sí, al mismo tiempo, quiso salir en su defensa al sostener que el coste final de las infraestructuras en España"es razonable e inferior a los países de la Unión Europea".

De cualquier forma, Piqué está convencido de que el mundo se encamina hacia el modelo anglosajón, en el que el precio del proyecto es cerrado. Esto, a su juicio, "nos obliga a cambiar mentalidades y actitudes". En esta línea, Béjar abogó por un sistema en el que se licite "con márgenes elevados", como ocurre con el anglosajón.

Los tres apostaron por los proyectos público-privados (PPP) como la mejor fórmula para realizar infraestructuras. Máxime en un contexto en el que el crédito bancario es cada vez más "difícil" de conseguir por las "condiciones" a las que están sometidas las entidades. Los fondos y los mercados de capitales son la alternativa que encuentran.