Empresas y finanzas

Solución salomónica: seguir el redondeo sueco de los precios



    ¿Cómo se puede evitar adaptaciones de los precios en contra del consumidor si se retiran las pequeñas monedas? Finlandia y los Países Bajos adoptaron el conocido como "redondeo sueco".

    La regla opera de la siguiente manera: cualquier precio finalizado en 1, 2, 6 y 7 céntimos se redondea hacia abajo. Un artículo que valga 7,72 euros, pasaría a 7,70 y por otro con una factura de 125,6 euros se cobrarían 125,5 euros. El proceso es inverso, hacia arriba, si finaliza en 3, 4, 8 y 9 céntimos.

    La regla sueca se aplica sobre el montante global de la compra y no sobre los precios individuales de los artículos, y solo si se paga con efectivo. No invalida a las divisas, que seguirán siendo de curso legal para las transacciones con tarjeta o cualquier otro pago telemático, incluídas las compras en tiendas online.

    Algunos bancos centrales y gobiernos no son conformes con la retirada por miedo a que enfríe el consumo. Los ciudadanos vemos más atractivos precios finalizados en 9,99 que cifras redondas como son los 10 euros. Siempre podría testearse.

    En Irlanda se simularon todos los impactos, ventajas y desventajas de dar el paso en una localidad acotada y perfectamente preparada para el estudio.