Los estancos podrán vender a través de Internet al resto de países de la UE
- Deberán registrarse previamente y pagar los impuestos sobre el tabaco en el país de destino
- El Tribunal de Luxemburgo obligó a cambiar la ley y permitir la libertad de mercancías
Los estancos españoles podrán vender a partir de ahora tabaco a través de Internet a los ciudadanos de cualquier otro país europeo, al mismo tiempo que quedará también permitida la importación de labores o productos que no se distribuyan directamente en España.
En concreto, de acuerdo con el proyecto de Real Decreto elaborado por el Gobierno, al que ha tenido acceso elEconomista, y por el que se modifica la legislación actual, "los titulares de expendedurías de tabaco y timbre podrán vender a distancia a personas residentes en otro Estado miembro de la Unión Europea labores de tabaco que tengan la condición de mercancías comunitarias".
Para poder llevar a cabo esta venta, la ley deja muy claro, no obstante, que los estancos deberán comunicárselo previamente al Comisionado del Mercado de Tabacos, un organismo dependiente del Ministerio de Hacienda encargado de la supervisión del sector, y pagar además los impuestos correspondientes en el país de destino de las exportaciones.
España sigue siendo uno de los países con los precios más bajos de toda la UE, debido fundamentalmente a la menor presión fiscal, pero el hecho de que haya que pagar los impuestos del país al que se exporta estrechará la diferencia. Todo apunta así a que los productos que más se podrían vender fuera son los puros, de un coste mucho mayor al de los cigarrillos.
En el Proyecto de Real Decreto se insiste también en que la venta online sólo está permitida fuera de las fronteras españolas. De hecho, sigue fijándose como infracción "la realización de actividades comerciales que excedan del ámbito propio de la concesión como la venta a distancia o por medios telemáticos o mediante exportación, con excepción de la venta a distancia a personas residentes en otro Estado miembro de la Unión".
La reforma de la legislación es consecuencia de una sentencia del Tribunal Supremo tras una denuncia presentada por la asociación ECOT (Empresarios y Comerciantes de Tabaco) que reclamaba poder comprar labores de tabaco a terceros países. El Supremo planteó una cuestión prejudicial al Tribunal de Justicia de la Unión Europea, en Luxemburgo, y éste estableció que la exclusión de los expendedores para actuar como importadores resultaba contraria a la legislación comunitaria, por lo que ha habido que modificar la ley.
El Gobierno ha presentado ya el Proyecto de Real Decreto a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que el martes de la semana pasada emitió un informe valorándolo e instó al Gobierno a que, aprovechando esta modificación, acabe con el monopolio de la red.
"El modelo regulatorio del mercado de tabaco en España presenta fuertes restricciones a la competencia derivadas principalmente, aunque no de forma exclusiva, de la configuración del comercio al por menor como un régimen de monopolio del que es titular el Estado", asegura la CNMC.
Sin perjuicio de que se estudie la conveniencia o no de mantener este monopolio, el supervisor insta además al Gobierno a introducir medidas que abran el mercado a la competencia. Así, considera, por ejemplo, que es "desproporcionado" que las concesiones sean de 25 años y pide a Hacienda que "regule un plazo inferior" y plantea también eliminar las restricciones para ser titular de una expendeduría.
Fuerte malestar
Esto ha provocado un serio malestar entre todas las asociaciones y patronales de estanqueros. Maribel González, presidenta de ECOT, la asociación que llevó el caso ante Luxemburgo, asegura que "lo que nosotros reclamábamos era que se nos permitiera importar mercancía y vender también a otros países de la UE, pero en ningún caso que se acabara con el monopolio".
González va incluso mucho más allá y dice que "si se reduce el periodo de concesión exigiremos indemnizaciones". Y en la misma línea también, la Unión de Estanqueros, la principal patronal del sector, acusó ayer a la CNMC de desconocer la realidad del mercado y recordó la red de expendedurías garantiza el control sanitario y la recaudación de unos 10.000 millones de euros anuales en impuestos.
La fuerte caída de las ventas de tabaco como consecuencia del contrabando ha obligado a los 13.500 estancos españoles a buscar un cambio de estrategia para poder recuperar su rentabilidad y sobrevivir. Con este objetivo, la Unión de Estanqueros ha reclamado al Gobierno autorización para operar como oficinas de paquetería, llegando a acuerdos previos con empresas de transporte, y convertirse, además, en establecimientos con capacidad para poder gestionar el pago de recibos de todo tipo de empresas que no estén domiciliados en una cuenta bancaria.