Empresas y finanzas

Emilio Botín afirma desconocer la compra de Aguas de Fuensanta por Banesto en 1999



    El presidente del grupo Santander, Emilio Botín, declaró hoy ante el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid como imputado por su actuación en el proceso de compra del 45,3% de Aguas de Fuensanta, empresa vinculada a la familia de Rodrigo Rato, por Banesto. La entidad pagó 6 millones de euros por esta operación en 1999. Rato también deberá declarar el próximo 27 de mayo.

    Botín compareció ante el juez titular José Sierra durante 50 minutos y al salir de la vista se mostró sonriente, declinando hacer comentarios a la prensa. "Sin comentarios", se limitó a señalar el presidente del Santander a su salida, escoltado por cuatro agentes de seguridad.

    No obstante, según fuentes jurídicas, Botín aseguró "desconocer" cómo se gestó la operación de compra del 45,3% de Aguas de Fuensanta y declaró que su relación con Rodrigo Rato en 1999 era tan sólo "institucional" y estaba motivada por su entonces cargo de Ministro de Economía y Hacienda y vicepresidente del Gobierno de José María Aznar. El ejecutivo se negó a contestar las preguntas de la acusación particular.

    Jaime también declaró

    Tras esta declaración comenzó la comparecencia de su hermano y segundo accionista de Bankinter, Jaime Botín, imputado por los mismos hechos. Por su parte, el que fuera presidente de Banesto entre 1993 y 2002, Alfredo Sáenz, no acudió a declarar, a pesar de estar también citado como imputado. El abogado de la acusación particular, Antonio Panea, comentó a su llegada al juzgado que solicitará al juez que vuelva a citar a Sáenz para declarar.

    Jaime Botín explicó que en 1999 "no tenía ninguna responsabilidad ejecutiva" dentro del banco Santander por lo que no tuvo conocimiento de las operaciones que realizaba Banesto. El ejecutivo de Bankinter, sin embargo, reconoció mantener una relación "de muchos años" con la familia Rato y "personal y fluida" con el ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).

    Los argumentos de la defensa

    Fuentes cercanas a la defensa explicaron a Europa Press que este procedimiento proviene del "equipo habitual" del ya fallecido ex consejero de Banesto Rafael Pérez Escolar, que ha planteado una treintena de procedimientos judiciales contra Emilio Botín "sin haber ganado ninguno".

    Además, las mismas fuentes recordaron que los créditos fueron concedidos cuando Mario Conde estaba al frente de Banesto e indicaron que la compra del 45,3% de Aguas de Fuensanta fue "una manera de liquidar el crédito". Asimismo, indicaron que no hubo trato de favor porque Aguas de Fuensanta tenía ofertas de otras empresas del sector.

    El juez les imputa a todos ellos presuntos delitos de apropiación indebida, administración desleal, falsedad en documento mercantil, cohecho y negativa a socio del derecho de información. Según los denunciantes, Banesto adquirió el 43,5% de Aguas de Fuensanta pagando un sobreprecio para "ganarse el favor de Rato" y "cancelar créditos impagados" de los vendedores cuando la empresa "presentaba una situación de quiebra técnica".