Empresas y finanzas

Los corredores de seguros amenazan con llevar a la banca ante Competencia

  • Algunas entidades utilizan los datos de pólizas ajenas para contraofertarlas
  • Protección de Datos ve una vulneración en la ley si no hay autorización


La tentación para un banco de apropiarse de información privilegiada para robar a las aseguradoras clientes puede tener los días contados. Los corredores y agentes de seguros llevan años denunciando que algunas entidades aprovechan los datos personales incluidos en los recibos girados por las aseguradoras para contraofertar al cliente pólizas similares a precios inferiores, casi al instante de recibir la orden de pago de la prima domiciliada.

Hasta ahora eran quejas verbales, avivadas recientemente con críticas similares por el presidente de Mapfre, Antonio Huertas. Pero la patronal de los corredores Adecose dio un paso más en febrero y solicitió a la Agencia de Protección de Datos (APD) que evaluase dicha praxis. En un informe evacuado el pasado día 3, el organismo aclara que el banco no puede apropiarse de la información confidencial para emprender acciones comerciales, salvo autorización expresa del cliente.

Adecose baraja ahora ampararse en sus tesis para denunciar dicha conducta, en solitario o junto a otros agentes del sector asegurador, ante las autoridades de Defensa de la Competencia, desveló ayer su presidente Martín Navaz.

La crisis extiende la conducta

La asociación que aúnan a firmas con el 60 por ciento de las primas gestionadas por los corredores se apoya en un párrafo donde la APD limita el pronunciamiento a su ámbito de actuación, sin entrar a valorar otras normas que pudieran ser relevantes, "como las relacionadas con el derecho a la propiedad". "Apunta la posibilidad de que vulnera la normativa de competencia desleal", interpretó ayer Juan Zabía de la Mata, el abogado al que Adecose encomendó analizar el alcance de la respuesta de la APD.

La asociación sostiene que la irregular manera de proceder se ha "generalizado" ante la necesidad de la banca de buscar nuevas fuentes de ingresos para mejorar sus hoy anoréxicas cuentas por culpa de la crisis. "Son más habituales en los ramos personales, porque han acabado comoditizándose todos (salud, vida, autos...) pero también se da en empresas", lamentó Navaz.

Los corredores confían en que el pronunciamiento de la APD sirva para corregir prácticas que consideran antiéticas "por la vía de la prevención". En su defecto, el recurso más natural sería interponer denuncias ante la misma APD.

Esta vía tropieza, sin embargo, con un difícil desafío: exige la formulación de la demanda por parte del cliente y el organismo no actúa de oficio. Los corredores reconocen pocas expectativas en la efectividad de este recurso por la renuencia de los ciudadanos a querellarse contra entidades con las que mantienen su posición financiera y de cuya buena relación depende una comisión o un crédito. El canal alternativo son las autoridades de Competencia, donde Adecose se siente legitimado para presentar batalla como asociación.

La guerra está servida, aunque en el sector financiero niegan la existencia de la criticada conducta y sostienen que, de producirse, sería puntual y nada generalizada. Otras fuentes valoran que la consulta de la APD introducirá claridad en las prácticas contractuales, sin mucho más alcance. Estas fuentes apuntan que el ciudadano autoriza con frecuencia a la entidad a utilizar sus datos para que le formule ofertas comerciales cuando contrata una cuenta, sin ser demasiado consciente porque va en la letra pequeña.

Dificultad para probarlo

La corrección del proceso se complica ante la imposibilidad de verificar que hay indicaciones estratégicas para actuar así en la entidad, aunque ocurra en ciertas sucursales, y por la dificultad para probar la conducta desleal.

Adecose atisba una vía para demostrar irregularidades con el seguro de autos: verificar si el banco o su filial aseguradora accedió al historial de siniestralidad del cliente en el fichero Histórico de Seguros del Autómovil antes de presentar la contraoferta. "Se estaría vulnerando el Código de Conducta del fichero" que exige una petición previa del cliente, ilustró el abogado Juan Zabía.