Empresas y finanzas
El Gobierno penaliza a las industrias con un nuevo recorte de 300millones
Las industrias no se escapan de los dolorosos recortes que contempla la reforma energética aprobada el pasado viernes. El Real Decreto de Estabilidad Financiera suprime los suplementos que recibe la cogeneración -que se utiliza en estas instalaciones para generación eléctrica y consumo propio- y que según fuentes del sector supone una reducción de ingresos de unos 300 millones de euros al año.
En concreto, el Ministerio de Industria ha decidido eliminar el complemento por eficiencia y también la bonificación por energía reactiva. Se trata de unos incentivos que reciben también las tecnologías renovables y que supone un profundo golpe para la retribución del régimen especial.
Según el texto publicado el sábado en el Boletín Oficial del Estado, el fin de estos suplementos se producirá "con carácter inmediato" con el objetivo de "evitar cualquier afección al modo de funcionamiento de las instalaciones que no pudiera corregirse una vez se apruebe la nueva metodología".
En este apartado el Ministerio de Industia, consciente de la polémica medida, insiste en que es "imprescindible y urgente" reducir los costes del sistema. "Además, estas medidas no afectan a la rentabilidad de las instalaciones, ya que no fueron tenidas en cuenta para la determinación del régimen económico", añade el texto.
Pero lo que más preocupa a este sector es el hecho de que el Gobierno no haya aclarado cuál será la regulación definitiva que impondrá al régimen especial. De momento, el Ministerio de Industria ha aprobado una regulación transitoria hasta que esté en marcha el Real Decreto para instalaciones renovables.
Las renovables recibirán un complemento por sus costes de inversión basado en estándares por tecnologías, aunque no se ha aclarado cuáles serán estos estándares. En el caso de la cogeneración, el sector ya advierte que tal vez para algunas instalaciones les interese parar su actividad porque el golpe asestado es demasiado fuerte.
Fin de los tradicionales incentivos por parar en máxima demanda
Cada año a la hora de fijar las tarifas para comienzos de ese ejercicio se recogían también los costes del sistema, entre los que se encontraban la interrumpibilidad de la gran industria -incentivos por desenchufarse del sistema en momentos de punta de demanda-.
La cantidad se fijaba a priori, un modelo con el que ha acabado la reforma energética. El Ministerio de Industria quiere que la cuantía de este servicio sea más eficiente y competitiva y que se decida mediante un mecanismo de subasta que determinará quién cobra el servicio.