Empresas y finanzas

La china Shuanghui deberá lanzar una opa a Campofrío o vender un 7% del capital



    Campofrío cambia de manos. El gigante de la alimentación chino Shuanghui International Holdings ha alcanzado un acuerdo para adquirir por 7.100 millones de dólares (5.504 millones de euros) al grupo estadounidense Smithfield Foods, principal accionista de la cárnica española con una participación del 36,99% del capital.

    De acuerdo con la legislación española, una vez que se complete la operación, la china debería lanzar también una OPA sobre la española ya que superaría el 30% del capital y tendría el control de la misma. Eso o vender un 7% en el plazo máximo de 3 meses. Campofrío ha remitido hoy un comunicado a la CNMV en el que asegura que no ha recibido aún ninguna notificación por parte del grupo chino sobre qué es lo va a hacer.

    Hay que tener en cuenta que cuando Smithfield desembarcó en el capital de Campofrío en 2008, la CNMV le eximió de lanzar una OPA sobre la totalidad porque argumentó que no iba a controlar la compañía y que tenía un pacto con el presidente, Pedro Ballvé, titular del 12,8%, para no tomar el mando en el consejo. El problema es que ese pacto concluyó en noviembre de 2011 y si Shuanghui entra ahora, sí que tendría la gestión y el mando.

    Hoy la CNMV suspendió a primera hora de la tarde la cotización de Campofrío cuando se revalorizaba un 11,8%, hasta 5,40 euros por título. Campofrío, que facturó el año pasado 1.918 millones de euros y obtuvo un beneficio neto de 15,7 millones, tiene como consejero delegado a Robert Sharpe, que en principio continuará al frente.

    De momento, y según los términos del acuerdo de opa, la firma china pagará a los accionistas de Smithfield Foods 34 dólares en efectivo por cada acción, lo que representa una prima del 31% respecto a su precio de cierre del pasado martes.

    "Se trata de una gran operación para las personas relacionadas con Smithfield, así como para los ganaderos y agricultores de Estados Unidos", ha asegurado el presidente y consejero delegado de Smithfield Foods, Larry Pope. "No prevemos cambio alguno en la forma en cómo funciona la compañía ni en el mercado norteamericano ni en el resto del mundo", insistió. Tras el cierre de la transacción, previsto para la segunda mitad de 2013, las acciones de Smithfield dejarán de cotizar y la estadounidense pasará a integrarse en el grupo chino.