CaixaBank devuelve las ayudas de Cívica y absorberá Banco de Valencia

CaixaBank vuela con las integraciones. Su consejo de administración acordó ayer devolver los 977 millones de euros en ayudas recibidas por Banca Cívica y desveló su inclinación a absorber Banco de Valencia, frente a la opción de mantenerlo como una filial independiente cotizando o no en bolsa.

Una solución así, idéntica a la aplicada a finales del pasado con Cívica, resuelve la incertidumbre para los accionistas del Banco de Valencia, cuyas inversiones se encuentran atrapadas desde hace días en bolsa ante la casi imposiblidad de vender los títulos. CaixaBank adquirió el 98,9 por ciento de Banco de Valencia en manos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob). Queda apenas un 1,1 por ciento en manos ajenas, propiedad de antiguos accionistas y de aquellos inversores que la pasada semana recibieron acciones del banco a cambio de la deuda subordinada en su poder, tras aplicarles fuertes quitas a sus bonos, por imposición de Bruselas, que exige que accionistas y dueños de deuda con- tribuyan al rescate de los bancos.

Para efectuar dicho canje, el Frob tuvo que valorar las acciones y les otorgó un precio testimonial: de apenas 0,01 euros, al que se desplomó la cotización el viernes pasado y del que no se ha movido, porque la negociación está estrangulada, ya que nadie compra.

La fusión es suceptible de dar otro disgusto a los accionistas a corto plazo. En el mercado estiman que las acciones de Banco de Valencia serán valoradas en alrededor de 0,005 euros, la mitad de la actual cotización, antes de ejecutar el canje con acciones de CaixaBank. La razón es que la entidad debe absorber aún las millonarias pérdidas en las que incurrió en 2012. El cálculo es simple: Banco de Valencia debe cargar los 2.235 millones en pérdidas contra su capital, situado en alrededor de 4.600 millones de euros. Quedan un valor neto contable próximo a los 2.365 millones por el cien por cien de Banco de Valencia. El 1,1 por ciento supone apenas 26,01 millones de euros, a repartir entre los 5.058,95 millones de acciones en manos de minoritarios (deja el valor del título en 0,0051 euros).

La operación se realizará este año, que arranca con la devolución al Frob de los 977 millones prestados en 2011 a Banca Cívica y que CaixaBank reintegra ahora, pese a que disponía de plazo hasta febrero del ejercicio 2016.