Empresas y finanzas

Los préstamos a empresas caen en 2012 el 8%, el doble que a hogares



    Parte del descenso refleja el traspaso de los activos inmobiliarios a la Sareb.

    El año pasado se cerró sin ningún síntoma que haga pensar que el crédito puede volver a fluir a empresas y hogares. Con la tónica de los últimos tiempos, en los que se van encadenando casi sin excepción recortes en la cartera crediticia de los bancos desde 2011, los préstamos a hogares y empresas cerró el ejercicio con tasas de descenso interanual.

    Así, según los últimos datos publicados por el Banco de España, el saldo de los créditos bancarios concedidos a los hogares descendió en diciembre a 835.342 millones de euros, tras recortarse un 4,08 por ciento respecto al mismo mes del año anterior.

    El único consuelo al menguante saldo de los préstamos es que el ritmo de descenso parece no coger velocidad adicional en los últimos meses. En noviembre, la bajada del saldo era del 3,97 por ciento, en el mes anterior de algo más del 4 por ciento y en septiembre el recorte se situaba en el 4,2 por ciento.

    Estos datos indican que en un año, la cartera crediticia a los hogares se ha recortado en unos 35.000 millones de euros.

    Más acusada es la evolución de los préstamos a empresas, cuyo saldo no sólo sigue descendiendo, al igual que el de las familias, sino que lo hace cada vez a un ritmo mayor. En el último mes del año, el saldo se ha situado en 1,155 billones de euros, lo que supone un 7,96 por ciento de descenso respecto al volumen de la cartera del mismo mes del ejercicio anterior. Unos 100.000 euros menos que hace doce meses.

    En septiembre, el volumen de la cartera de préstamos bancarios a las empresas había menguado un 4,28 por ciento en tasa interanual.

    Sin embargo, las cifras de final de ejercicio se deben ver atenuadas por el efecto del traspaso de activos y préstamos inmobiliarios de la banca rescatada y débil al banco malo.

    54.000 millones por la Sareb

    Según advertía el Banco de España, las cifras que aparecen ahora correspondientes al mes de diciembre reflejan el traspaso de activos y créditos inmobiliarios de las entidades del Grupo 1 (Bankia, CatalunyaCaixa, Novagalicia y Banco de Valencia) a la Sareb, y el efecto más directo es que desaparecen de balance alrededor de 54.000 millones de euros del saldo de créditos a familias y empresas.

    Esto quiere decir que en esa cifra, la disminución del volumen de la cartera de crédito no se debe a nuevas restricciones de la banca sino a un mero efecto contable al desaparecer del balance de las entidades.

    Si se restan los 54.000 millones de la evolución anual, el descenso de la cartera de créditos a hogares y empresas es de unos 80.000 millones de euros.

    Mientras, el crédito a las administraciones sigue mostrándose libre de estas limitaciones y el volumen de la cartera de préstamos crece a tasa interanual muy cerca del 16 por ciento.

    Para los próximos meses, los bancos no se muestran optimistas. La debilidad de la economía y las altas tasas de paro, anticipan una demanda débil que se une a un sector todavía en proceso de reestructuración.

    La bajada de los tipos de interés de referencia hasta mínimos históricos hace que el margen de las entidades se estreche aún más, lo que tenderá a que las entidades lo intenten compensar con mayores diferenciales.

    A este respecto, el presidente de Caixabank, Isidré Fainé aseguró que en los créditos cada vez hay menos margen y que conceder préstamos "se está convirtiendo en un servicio público".