Empresas y finanzas

Eurotunnel en manos de la Justicia sin acuerdo entre acreedores



    París, 13 jul (EFECOM).- El grupo franco-británico Eurotunnel quedará en manos de la Justicia a menos que de aquí al próximo día 25 los acreedores logren un compromiso de reparto de sacrificios entre ellos sobre la base de la última propuesta de la dirección, que abandonó hoy las negociaciones al agotarse el plazo fijado.

    "No tengo ya nada que negociar con los acreedores", explicó en conferencia de prensa el presidente de Eurotunnel, Jacques Gounon, pero precisó que puede haber ajustes entre los tenedores de deuda para repartirse los 1.860 millones de euros de obligaciones convertibles en acciones que fija su proposición presentada la pasada noche.

    Gounon consideró que había ido "casi más allá de lo razonable" con su última oferta, manifestó su "sorpresa" y "decepción" por la actitud del banco Deutsche Bank, que lidera a los acreedores subordinados de su empresa, y rechazó dicha oferta durante el plazo de negociación que finalizaba la pasada medianoche.

    Atribuyó esa negativa a firmar al hecho de que esos acreedores subordinados han aumentado sus expectativas una vez que Eurotunnel firmó el pasado 23 de mayo un acuerdo con los principales tenedores de la deuda.

    El grupo constituido en torno a Deutsche Bank controla algo más del 25% de la deuda subordinada de Eurotunnel, lo que le da una minoría de bloqueo sin cuyo acuerdo no se puede aprobar la reestructuración de la deuda de la compañía que explota el túnel ferroviario bajo el Canal de la Mancha.

    Una vez terminado el plazo de negociación entre la dirección y los acreedores, el Tribunal de Comercio de París celebró esta mañana una audiencia en la que Gounon pidió la activación del procedimiento de salvaguarda, una nueva figura jurídica del derecho francés que permitiría que la empresa siga funcionando bajo supervisión judicial pero sin declararse en suspensión de pagos.

    El Tribunal se pronunciará el próximo día 25 si acepta la salvaguarda, con la que la actual dirección de Eurotunnel seguiría en su puesto y se congelarían los reembolsos de deuda mientras varios expertos judiciales intentaban una mediación para poner de acuerdo a los acreedores sobre el ajuste de la deuda.

    Gounon advirtió de que incluso con la salvaguarda, si no se logra un compromiso que pueda ser avalado por una asamblea de accionistas -la inicialmente convocada para el 27 de julio se anuló hoy- antes de finales de septiembre, Eurotunnel se vería abocada a la suspensión de pagos y luego a su liquidación.

    A menos que los acreedores optaran por activar el mecanismo de sustitución por el que se colocarían al frente de la compañía, una opción a la que los principales tenedores de la deuda no quieren llegar y con la que los accionistas podrían perderlo todo.

    En todo caso, el presidente insistió en que el funcionamiento de la empresa no está en peligro por tratarse de un servicio público que, al margen de sus obligaciones de reembolso de la deuda, tuvo el pasado año un margen operativo del 55%.

    La propuesta hecha por Gounon la pasada noche se basa en una reducción del 57% la deuda de Eurotunnel, que quedaría en 3.870 millones de euros y en la distribución de "títulos híbridos" en forma de obligaciones reembolsables en acciones por valor de 1.860 millones, 400 millones más de lo establecido en el compromiso firmado en mayo con los acreedores principales.

    Eso significaría que los actuales accionistas verían diluida su participación, que podría reducirse al 13% en favor de los acreedores.

    Los problemas de Eurotunnel derivan de los errores de cálculo de origen, ya que de una parte la construcción del túnel acabó costando 13.720 millones de euros en lugar de los 7.320 millones previstos en principio mientras que el tráfico de la nueva infraestructura ha sido muy inferior de lo augurado. EFECOM

    ac/jj