Bill Clinton ofrece una defensa entusiasta de Obama

Campechano, extendido en los detalles y demostrando que sigue siendo un brillante orador casi 12 años después de dejar el cargo, Clinton hizo una defensa más convincente de las acciones de Obama como presidente de la que quizá el actual inquilino de la Casa Blanca ha ofrecido.

Obama, dijo el ex mandatario, no debe ser culpado por la mala economía que heredó en 2009 y ha establecido las bases para un crecimiento fuerte - si los votantes le dan más tiempo y lo reeligen el 6 de noviembre.

"Escúchenme ahora", dijo Clinton. "Ningún presidente -ni yo, ni ninguno de mis predecesores- podría haber reparado completamente todo el daño que encontró en sólo cuatro años", indicó.

El discurso fue una demostración clásica de la oratoria de Clinton, y la prueba de que a pesar de una serie de dolencias cardíacas, el político de 66 años todavía acapara atención política.

Saliendo frecuentemente de su discurso preparado, Clinton exhibió a Obama como un hombre razonable al que el Partido Republicano le impidió crear más puestos de trabajo y reducir el déficit presupuestario.

Su discurso, pronunciado poco antes de que los demócratas designaran formalmente a Obama para un segundo mandato, fue un recordatorio de los excedentes presupuestarios y el crecimiento del empleo que Clinton lideró en la década de 1990 durante sus dos mandatos en la Casa Blanca.

Si eso va a bastar para ayudar a mantener a Obama en el cargo es una pregunta abierta.

Obama se encuentra en una posición vulnerable con la tasa de desempleo en un 8,3 por ciento. Las encuestas muestran una reñida carrera entre él y Romney. El presidente hablará a la convención el jueves y el viernes el Departamento del Trabajo dará una cifra de la tasa de desempleo de agosto.

Si los estadounidenses "renuevan el contrato del presidente", la economía va a mejorar y "ustedes lo sentirán", dijo Clinton.

"Amigos, si el pueblo estadounidense cree lo que acabo de decir o no puede ser toda la elección. Sólo quiero que sepan que yo le creo. Con todo mi corazón, yo le creo", dijo.

Clinton recibió aplausos de miles de demócratas que abarrotaban el salón de convenciones de Charlotte, Carolina del Norte. Los gritos se hicieron más fuertes cuando Obama salió al escenario tras el discurso de Clinton. Clinton saludó al presidente y le dio un fuerte abrazo.

Los republicanos no se mostraron impresionados, diciendo que Obama no ha trabajado en cooperación con sus adversarios como Clinton lo hizo alguna vez.

"El presidente Clinton ofreció esta noche un fuerte contraste entre él y el presidente Obama", dijo el portavoz de Romney Ryan Williams.