CE admite preocupación por crisis pero defiende autonomía de bancos centrales
En declaraciones a periodistas después de abrir en Sao Paulo la conferencia "El Euro: Implicaciones globales e importancia para América Latina", Durao Barroso señaló que la Comisión Europea (CE) "no se pronuncia sobre (asuntos de) las autoridades monetarias".
"Pero no podemos negar que estamos preocupados por la evolución de la inestabilidad entre las principales monedas internacionales. Es una situación indeseable, pero confiamos en nuestros principios macroeconómicos sólidos, como un déficit y una deuda bajos, creación de empleo y crecimiento de las exportaciones", apuntó.
Según dijo, en la CE "vamos a apoyar los esfuerzos del Banco Central Europeo (BCE), pero respetaremos, como siempre, su independencia y la de los otros bancos centrales".
Destacó que el BCE "ha reaccionado a las evoluciones más recientes de la crisis" financiera, agravada por la inestabilidad del sector crediticio estadounidense debido a los problemas en el campo de las hipotecas de riesgo, y aseguró que el futuro económico será "vigilado".
Para Durao Barroso, tanto la UE como Latinoamérica "tienen una situación económica más favorable para enfrentar la volatilidad financiera con equilibrio".
En el discurso de apertura del encuentro, Durao Barroso señaló que la conferencia se lleva a cabo en una época "oportuna" y aclaró que aunque el euro es la moneda de Europa, sus efectos no se limitan al bloque.
"La UE cree en el potencial de esta región (Latinoamérica), en especial de Brasil y el Mercosur, porque la situación está estabilizada", apuntó Durao Barroso, quien, sin embargo, recomendó "cautela económica" por el alza del precio internacional del petróleo y sus derivados.
En las proyecciones de la CE, según Durao Barroso, la economía mundial tendrá un crecimiento del 3,8 por ciento, diferente del 4,2 por ciento previsto inicialmente, mientras que a nivel europeo el cálculo bajó del 2,8 al 2,0 por ciento.
"Latinoamérica tiene un crecimiento sostenible y Brasil está en la trayectoria de las mejoras económicas, aunque no podemos desconocer que la desigualdad y la pobreza son un problema grave, el más grave de Latinoamérica", apuntó.
De la región, elogió "los progresos desde la década del noventa, a pesar de que algunos países (sin mencionar nombres) están en inestabilidad interna y con populismo fuera del tiempo".
En cuanto el euro, Durao Barroso manifestó que la moneda europea "proporciona un mercado sólido y con la inflación por el orden del 2,0 por ciento".
"Es una importante divisa de reservas y ha fortalecido el crecimiento acelerado desde 2006, 2007", anotó.
En el encuentro, que finalizará mañana, participan académicos y autoridades monetarias de Brasil, Argentina, Alemania, Chile, Dinamarca, Ecuador, España, Estados Unidos, Indonesia, Reino Unido, Italia y Hungría.
El secretario general de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), José Luis Machinea; el director para el Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI), Anoop Singh, y el vicegobernador del Banco de España, José Viñals, son algunos de los ponentes.
Durao Barroso será recibido mañana en Brasilia por el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva. EFECOM
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(con fotografías)