Los promotores apuestan por la vivienda turística para reducir el stock

El presidente de la Asociación de Promotores Constructores de España (APCE), Jose Manuel Galindo, ha insistido en que tienen una batería de medidas para acabar con el excedente de vivienda que ya han presentado a las Administraciones entre las que se encuentra la de potenciar la venta de viviendas turísticas, con lo que se obtendrían unos 50.000 millones de euros.

Durante la apertura de la Conferencia Inmobiliaria 2012, el presidente de la patronal reclamó un estudio completo de la vivienda turística, ayudaría al desapalancamiento del sector.

Según ha estimado, si estas viviendas representan la tercera parte del stock actual, dar salida a 250.000 casas a un precio de unos 200.000 euros inyectaría unos 50.000 millones de euros en el mercado inmobiliario.

Esta cantidad, añadió, es similar a los recursos que tiene que provisionar la banca o a los nuevos requerimientos de capital que precisaría el sistema financiero si se produce un deterioro aún mayor de los activos inmobiliarios.

El problema de la banca

Según explicó, el problema del sector reside en su vinculación con el sistema financiero y existe preocupación ante la posibilidad de que los activos "normales" se conviertan en "problemáticos".

En concreto, ha subrayado que este contagio podría suponer un ajuste de 60.000 millones de euros más, por lo que ha apelado a la necesidad de que exista un "cortafuegos", que podría pasar por la creación de un banco malo que saque del balance de las entidades de crédito activos inmobiliarios para no deteriorarlos más.

Sin embargo, ha hecho alusión a las palabras del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en las que afirma que es necesario sacar las viviendas del balance de los promotores, subrayando que ha existido un cambio en la sensibilidad de las administraciones públicas.

Galindo recordó que han presentado al Ministerio de Fomento, al de Hacienda y a las distintas administraciones públicas propuestas para crear una vivienda más barata, elaborar una nueva ley del suelo, armonizar la legislación autonómica, o contar con otras políticas de vivienda y propuestas de fiscalidad, entre otras medidas, para poner fin al problema y que el sector recupere el peso que le corresponde.

"Nosotros queremos ser ni más ni menos que lo que pesamos, no tenemos vocación de ser la locomotora. Lo hemos sido, se ha aprovechado todo el mundo de ello, y queremos ser lo que nos corresponde ser, un elemento motriz", ha señalado.

En su opinión, el sector inmobiliarios es "necesario" porque existe demanda, y "conveniente" porque tiene un efecto arrastre en otras ramas productivas de cerca del 40%, además de su efecto como creador de empleo.

El promotor ha remarcado que sólo la inversión residencial representa un 7% del Producto Interior Bruto (PIB) y ha llegado a alcanzar el 12%, comparándolo con otros sectores como la agricultura que concentra un 3% o la hostelería, que representa el 7% también.