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Sicur apuesta por la seguridad antiterrorista con pintura antibomba y robots



    Carlos Rubio.

    Madrid, 28 feb (EFECOM).- Una novedosa pintura que resiste a los atentados terroristas, robots autónomos para las inspecciones antibomba, y cámaras de vigilancia robotizadas con sensores térmicos para la visión nocturna, suponen parte de la apuesta de la feria Sicur en materia de seguridad antiterrorista.

    El Salón Internacional de la Seguridad (Sicur) congrega estos días en Ifema a más de 750 empresas dedicadas a la industria de la seguridad en todos sus segmentos (laboral, contra incendios, antiterrorista, informática y vigilancia) para exhibir propuestas tecnológicas de última generación.

    En la zona de la seguridad antiterrorista y defensiva, Sicur acoge desde robots para hacer inspecciones en lugares de difícil acceso, hasta inhibidores de frecuencia, tanto portátiles como para vehículos y edificaciones, que anulan la señal de cualquier artefacto electrónico que funcione por radiofrecuencia.

    Pero una pequeña compañía estadounidense ha dado una vuelta de tuerca al ingenio en la fabricación de propuestas para la seguridad antiterrorista, al exhibir una pintura antibomba que puede ser utilizada con fines militares y civiles en coches, fachadas, oleoductos, aeropuertos, cuarteles o almacenes para productos químicos.

    Se trata de un compuesto elaborado con "polímero elastómero", explicaron a Efe los representantes de la compañía Credit-Services que expone este producto en Sicur, y que permite que un muro de grandes dimensiones resista una explosión de más de 400 kilos de dinamita a nueve metros de distancia.

    Los expositores han destacado que el producto podría reducir las heridas por metralla, que causan el 80 por ciento de las muertes en los atentados, y han explicado que el polímero puede ser utilizado en chalecos antibala, como anticorrosivo para embarcaciones, en cajas fuertes e incluso para retardar la propagación de un incendio en la estructura de un edificio.

    La vigilancia mediante cámaras, que sigue siendo uno de las principales sistemas de prevención en distintos ámbitos de la seguridad, llega a Sicur con propuestas punteras como los robots dinámicos que poseen una autonomía de movimiento que permite visualizar cualquier ángulo con una óptima calidad de imagen, y que incluyen sensores de visión nocturna y detectores de calor humano.

    En cuanto a los rescates, se exhiben sistemas de comunicación para cascos, empleados en todo tipo de misiones, que funcionan como centros de mando y que son del tamaño de una maleta con todo tipo de prestaciones tecnológicas.

    Además de estas tecnologías defensivas y destinadas a la seguridad, algunos expositores exhiben armamento reglamentario para las fuerzas de seguridad en los 'stands', como pistolas Glock de todos los calibres, rifles, munición, cascos, chalecos antibala o prismáticos de visión nocturna, entre otros.

    No obstante, dentro de la oferta de Sicur también se encuentran otros dispositivos que han causado polémica, y que actualmente no están regulados, como las pistolas de descargas eléctricas, y otras tecnologías con las que se puede violar el derecho a la intimidad, como un teléfono móvil espía con el que se puede interceptar, escuchar conversaciones y recibir mensajes de otro dispositivo. EFECOM

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