Crisis inmobiliaria: la deuda 'real' abre más grietas inesperadas
Esto puede tener reflejo tanto en sus resultados como en sus activos. De hecho, ya varias empresas han dado signos de debilidad en la bolsa. Pero puede ser sólo el principio.
Metrovacesa
Un ejemplo se ha podido ya ver en Metrovacesa (MVC.MC). La compañía de los Sanahuja aseguró el lunes que el NNAV -valor neto de sus activos tras los impuestos- por acción había pasado de los 67,7 euros de septiembre a los 61,36 euros en diciembre. Esto supone una caída superior al 9,3 por ciento en menos de 90 días. Pero a pesar de este deterioro, la compañía se mostró optimista para los próximos ejercicios y calcula incrementos del 4 por ciento en sus activos.
Sin embargo, los expertos no lo tienen tan claro. "Estamos escépticos con la presentación de la inmobiliaria, porque creemos que ha sido demasiado optimista en un escenario de parón inmobiliario", explica Juan Fernández, analista de Inversis. En esta misma línea se posiciona Ibersecurities, que comentan que el plan estratégico les parece demasiado optimista y ambicioso.
¿Más recortes?
Sin embargo, fuentes del sector aseguran que es mejor plantear un escenario más negativo y que el mercado premie cualquier noticia positiva que pueda salir. De hecho, esto se ha podido ver en Renta Corporación (REN.MC), que a principios de enero realizó una presentación en la que recortaba drásticamente sus resultados de 2007 y aseguraba que no cumpliría con sus objetivos. Esto provocó que la cotización pasase de los 11 hasta los 9,45 euros. "Estamos más de acuerdo con la presentación de Renta, que con el optimismo de Metrovacesa", comenta un experto.
Por eso, las firmas de inversión aseguran que estarán muy pendientes de los resultados de Colonial , Renta Corporación y Realia (RLIA.MC). Durante el boom, las inmobiliarias se endeudaron según el valor de sus propiedades en vez de tomar como referencia la caja que hacían, al igual que el resto de las compañías del parqué. Lo que ocurre ahora es que el valor de esas propiedades ha bajado ante el cambio del ciclo, por lo que el ratio de endeudamiento de las inmobiliarias se ha elevado. En algunos casos, este hecho pondrá entre las cuerdas a algunas de las inmobiliarias. La empresa más endeudada es Colonial, en la que su apalancamiento supone 21 veces el beneficio bruto de explotación.
Según expertos del sector, la caída del valor de los activos podría registrar una media del 10 por ciento durante el último año. Un descenso que tendrá un impacto negativo en el endeudamiento y que afectará a las condiciones de préstamos sindicados que contrajeron estas empresas. Si a la hora de solicitar un préstamo se hubiera tenido en cuenta el beneficio bruto de explotación nunca hubieran ganado tanto peso de forma insana.