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Detectados otros cuatro 4 animales sospechosos en 3.323 análisis realizados



    Santander, 22 ene (EFECOM).- La Consejería de Ganadería ha detectado otros cuatro animales sospechosos de padecer Lengua Azul en los análisis realizados a 3.323 reses bovinas tras la aparición del primer foco en siete explotaciones de Ribamontán al Monte, donde se confirmaron 42 casos positivos.

    Estos cuatro nuevos casos, que todavía no han sido confirmados por el Laboratorio Nacional de Algete, han sido detectados en otras tantas explotaciones del municipio de Ribamontán al Monte.

    El jefe del Servicio de Sanidad Animal de la Consejería de Ganadería, Francisco Fernández, ha facilitado estos datos en una rueda de prensa en la que el titular del departamento, Jesús Oria, ha transmitido un mensaje de tranquilidad a los ganaderos y a los ciudadanos.

    El consejero ha subrayado que la Lengua Azul es una enfermedad infecciosa, pero no contagiosa, que se propaga a través de un mosquito y que en ningún caso puede trasmitirse a las personas.

    Se trata, por lo tanto, de un problema "exclusivamente de sanidad animal", que tampoco afecta al consumo de los productos (carne y leche), ha explicado Oria.

    No obstante, ha dicho que esta enfermedad provoca pérdidas económicas en el sector, por las restricciones al movimiento de ganado y por posibles descensos en la producción, y supone un gasto para la administración por el coste de los análisis y de las vacunas.

    El primer foco de Lengua Azul, correspondiente al serotipo 8, se declaró en Cantabria el 16 de enero tras detectarse siete animales positivos en una explotación de producción de leche de la localidad de Pontones (Ribamontán al Monte) compuesta por 193 animales.

    La Consejería inició después las investigaciones para averiguar si había otras explotaciones afectadas y confirmó la presencia de esta enfermedad en otras seis explotaciones pertenecientes a las localidades de Pontones, Omoño y Villaverde de Pontones, situadas en Ribamontán al Monte y muy próximas a la primera explotación positiva.

    El gobierno regional, que no ha detectado descensos en la producción de leche, ha analizado ya 3.323 reses bovinas de 138 explotaciones y otras 57 ovinas de 4 cabañas. En estos análisis ha detectado las cuatro reses enfermas, todas bovinas, cuyo positivo está pendiente de confirmar.

    Oria ha subrayado que todavía se desconoce el origen de este foco, causado por el mismo serotipo que se ha propagado por Europa, porque la primera de las hipótesis que se barajó ya ha sido descartada.

    En un primer momento se pensó que el origen de la enfermedad podía estar en el traslado a Cantabria de algún animal procedente de Europa, pero después se comprobó que todas las reses han sido objeto de controles antes de entrar en la comunidad autónoma.

    Como consecuencia de esta enfermedad, el Ministerio de Agricultura ha establecido una zona restringida para el serotipo detectado que afecta a todas las comarcas, salvo Liébana y Campoo. EFECOM

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