Applus+ invertirá 450 millones hasta 2011 para impulsar internacionalización
Con el objetivo de mejorar su rentabilidad, Applus+ fomentará su capacidad técnica con compras de pequeñas empresas -valoradas entre 30 y 40 millones de euros- en sectores como los ensayos no destructivos y las ingenierías vinculadas a la automoción, según ha explicado hoy el consejero delegado de la compañía, Joaquim Coello.
El primer ejecutivo de Applus+, que tendrá tres nuevos directores generales para desarrollar su plan estratégico, pretende pasar de unas ventas de 665 millones de euros al cierre de 2007 y un ebitda (beneficio antes de intereses, impuestos y amortizaciones) de 113 millones a una cifra de negocio de 1.200 millones y un ebitda de 220 millones en 2011 para poder competir con gigantes como el grupo suizo SGS y el francés Bureau Veritas.
Applus+ se ha fijado la meta de crecer un 15% en ventas y un 19% en ebitda al año hasta 2011, para pasar de un ebitda sobre la cifra de negocio del 15% al 18%.
Según Coello, 2008 será un año de consolidación en el que sólo se prevén compras por valor de entre 50 y 70 millones -del total de 450 millones hasta 2011- y 2009, el de crecimiento, sobre todo en países como el Reino Unido e Italia en el área de ensayos no destructivos.
Con una deuda de 1.000 millones de euros, Applus+ ya negocia la compra de una ingeniería del automóvil en Corea del Sur, acudirá al concurso que en breve convocará la Comunidad de Madrid para abrir nuevas estaciones de inspección técnica de vehículos (ITV) y prevé ampliar en una o dos instalaciones de este tipo su red en el País Vasco y la Comunidad Valenciana.
En cuanto a los planes de salida a bolsa, barajados ya por los antiguos accionistas -Agbar, Unión Fenosa y Caja Madrid-, Coello ha dejado claro que Carlyle permanece en las empresas entre 4 y 7 años.
A partir de 2011 "no sé qué va a ocurrir", ha dicho, antes de contemplar dos posibilidades: que Carlyle venda su participación del 70% o que la compañía salga a bolsa, algo para lo que ya tendrá una dimensión adecuada si se logran los objetivos del plan estratégico.
Para cumplir con la futura ley de Seguridad Industrial y con su reglamento, que estima una cuota máxima por operador del 50% en un plazo de cinco años en el sector de las ITV, Applus+ dividirá los activos de su filial Applus+ ECA ITV -donde controla el 51% del capital-, sobre todo una veintena de estaciones, con sus socios, las familias Puignou y Marugan, que poseen el 49% restante.
En América, donde está presente en doce países, entre ellos Costa Rica, Panamá, Guatemala y Ecuador, Applus+ centrará sus esfuerzos en México, EEUU, Colombia, Argentina y Chile.
Un centenar de directivos, así como la firma de capital riesgo ICG -que ha aportado un tramo del préstamo para financiar la compra de la compañía-, controlarán el 7% de Applus+, grupo que cuenta con un consejo de administración integrado por doce miembros, nueve designados por Carlyle -entre los que habrá independientes- y el resto, por el consorcio liderado por Caixa Catalunya.
El hombre fuerte de Carlyle en España, Pedro de Esteban, presidirá el consejo, que tendrá dos vicepresidentes: el presidente de Caixa Catalunya, Narcís Serra, y el ex presidente de Applus+ Ernesto Mata, que no está presente en el accionariado pero supone una "cierta voluntad de continuidad", según Coello.
La participación del 20% de la Generalitat en el Instituto de Investigación Aplicada del Automóvil (IDIADA) se mantendrá, mientras que la del 5% en el Laboratorio General de Ensayos e Investigaciones (LGAI) -donde se añadirá capacidad de ingeniería- se incrementará hasta poco más del 10%.
Applus+ ha retirado las demandas contra la Generalitat por la anulación en 2004 de la prórroga de la concesión de las ITV. EFECOM
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