Empresas y finanzas

Muere en Panamá John Rosillo, el primer impulsor del proyecto Diagonal Mar



    Barcelona, 7 nov (EFECOM).- El empresario Juan Manuel Rosillo Cerrejón, más conocido como John Rosillo, el hombre que en la década de 1990 trajo a la promotora norteamericana Kepro a España para construir el barrio de Diagonal Mar en Barcelona, ha fallecido en Ciudad de Panamá, según fuentes financieras y familiares cercanas.

    Rosillo, originario de Texas (EEUU), fue encontrado muerto en el Hotel Ambassador de Panamá el pasado 21 de octubre, si bien su fallecimiento ha trascendido hoy en medios financieros de Barcelona.

    John Rosillo se encontraba en busca y captura por la policía española después de que en 2002 fuera condenado a más de seis años de cárcel por diversos delitos económicos y por defraudar a Hacienda más de 8,5 millones de euros, precisamente por las operaciones de compra de los terrenos donde debía construirse el nuevo barrio.

    El Gobierno español también había pedido su extradición por haber provocado un accidente de tráfico en estado de embriaguez en el que perdió la vida una persona, si bien Panamá no la concedió.

    John Rosillo, que también estuvo en la cárcel en Panamá en 2005 y que era testigo de cargo de la fiscalía española para otros casos, ha acabado su vida muy lejos de las grandes operaciones inmobiliarias por las que fue conocido en España.

    Kepro era filial del grupo asegurado Kemper, el cual, de la mano de John Rosillo, compró los terrenos de Diagonal Mar y se comprometió a invertir 1.200 millones de euros en la construcción de lo que hoy es el barrio homónimo.

    Diagonal Mar debía contar con 221.000 metros cuadrados de viviendas, con el actual centro comercial de Diagonal Mar y con un total de 54.000 pisos, los últimos de las cuales se están acabando de construir ahora.

    En noviembre de 1995, Kepro suspendió pagos en España alegando "graves problemas de liquidez", lo cual paralizó el proyecto hasta que un año después otro grupo norteamericano, Hines, lo compró a Zurich, dando entrada a socios locales como las promotoras catalanas Habitat y Espais.

    Cuatro años después, en 1999, la Audiencia de Barcelona condenó a un total de 18 años de prisión a seis acusados por el llamado "caso Kepro", un fraude inmobiliario en la última gran zona edificable de la capital catalana orquestado durante el "boom" de los Juegos Olímpicos de 1992.

    El principal implicado fue precisamente el empresario John Rosillo, consejero delegado en España de la empresa Kepro, condenado a 6 años y 6 meses de prisión por tres delitos contra Hacienda por esta operación, por la que se ocultaron al fisco español más de 8 millones.

    Se da la circunstancia de que Rosillo y los otros condenados utilizaron a un deficiente mental -que falleció antes de conocerse la sentencia- como tapadera de la operación, que consistía en la compraventa por parte de Kepro de dos fincas en la zona de Diagonal Mar de Barcelona.

    La Sala reprochó que se utilizase al deficiente Juan F.B., de 53 años, y luego se intentara deshacerse de él, como si fuese una "prueba", según recriminó la acusación, que denunció que se le enviara solo y a su suerte a un suburbio de Caracas (Venezuela), donde deambuló durante 25 días sin dinero y en peligro.

    Precisamente, el caso se descubrió cuando el deficiente, al que los acusados convirtieron en accionista mayoritario de una sociedad "fantasma", fue sometido a una inspección fiscal por un incremento de patrimonio no justificado y endosado por los acusados, tras lo cual decidieron enviarlo a Caracas.

    Allí Juan F.B no perdió la vida, sino que apareció vestido con harapos en una oficina del entonces Banco Exterior de España gritando "¡España, España!", tras lo cual fue identificado, repatriado y se descubrió el fraude, que protagonizó la persona que ahora ha fallecido. EFECOM

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