Empresas y finanzas

Telefónica pacta que los despidos se realicen en los cinco próximos años



    Gráfico TELEFONICA

    Telefónica presentará la próxima semana ante el Ministerio de Trabajo un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que ha pactado con las principales fuerzas sindicales de la compañía. Como ya anunció la propia multinacional el pasado 14 de abril, el recorte afectará al 20% de la plantilla de fijo de Telefónica España, lo que supone cerca de 6.000 empleos.

    No obstante, las condiciones del recorte serán ligeramente diferentes a las expuestas por Guillermo Ansaldo, presidente de Telefónica España, en el último encuentro con los inversores. El ajuste laboral no se realizará en los tres años inicialmente previstos, sino que se dilatarán durante los cinco próximos años. La multinacional ha accedido a satisfacer esa demanda sindical, así como a prolongar en idéntico plazo la vigencia del convenio colectivo actualmente en negociación.

    Como contraprestación, el grupo de telecomunicaciones ha avanzado en su empeño por vincular las revisiones salariales a la productividad, en lugar de al Índice de Precios al Consumo (IPC). Esa novedad está llamada a marcar un hito en la historia empresarial española, por lo que supone de ruptura frente a los modelos retributivos tradicionales.

    El propio Ansaldo ya desveló ante los analistas que cada punto de subida del IPC reflejado en el convenio incrementaba en 15 millones los costes anuales de la operadora.

    Exigencias del mercado

    César Alierta, presidente de Telefónica, abonó el terreno para la referida regulación de empleo en su intervención en la junta de accionistas, celebrada el pasado miércoles. Así justificó la necesidad de realizar los recortes ante las exigencias competitivas de su sector. Entre otros detalles, "Telefónica tiene el doble de plantilla que sus competidores de fijo y móvil", incidió el primer ejecutivo del grupo. Acto seguido aseguró que si el operador no hubiera realizado ese tipo de medidas a finales de los 90, "Telefónica estaría quebrada".

    Entre los mensajes que estos días ha reiterado Telefónica entre los sindicatos y trabajadores es que cualquier medida relacionada con el recorte de plantilla se negociaría con los representantes de los afectados, siempre con voluntad de pacto. Así, Alierta recordó que "los trabajadores que se han acogido a los ERE de Telefónica lo han hecho en las mejores condiciones, siempre teniendo en cuenta los principios de universalidad, no discriminación y voluntariedad, y en esa línea lo seguiremos planteando", dijo Alierta ante los accionistas.

    Telefónica suprimió el año pasado mil empleos en Alemania (el 10% de su plantilla). En aquel país, la regulación se realizó sin especial conflictividad sindical. Tanto, que Alierta recalcó que allí "no pasó absolutamente nada".

    Por su parte, el sindicato CGT reiteró ayer que "no puede dar por buena la destrucción de 6.000 empleos en una empresa rentable con beneficios record y en un país con una tasa de paro del 21%".