Empresas y finanzas

Aniversario naranja: el diario elEconomista cumple 500 números

    Primera portada de <i>elEconomista</i>. El diario estaba, al fin, en la calle. <i>Foto: Archivo</i>


    ¿Por qué un periódico económico? Esa era la pregunta hace 500 números. La respuesta es fácil, después de más de un año y medio haciendo este periódico, hemos conseguido que la prensa económica sea clara y concisa y no tan aburrida ni monótona, nuestros titulares son más directos, las imágenes más creativas, el diseño más atractivo y todo eso en sólo 500 números.

    La idea estaba en nuestra cabeza, realizarla era complicado pero lo realmente difícil fue encontrar gente del mundo de la economía, que apostase por algo que todo el mundo decía que era imposible, ¿cómo un periódico económico puede ser riguroso y conciso a la par que alegre y divertido?

    Los periódicos económicos hasta ese momento eran grises, aunque de color salmón, dirigidos a los eruditos de la economía, con unos gráficos para especialistas del sector y llenos de fotos cuadradas.

    Vuelve el periodismo de investigación

    Nuestra labor durante estos primeros 500 números ha sido acabar con los clichés anteriores e introducir el periodismo económico por la vía de la modernidad. Frente a la información anodina y de teletipo, hemos introducido análisis y enfoques novedosos, hemos recuperado el contar historias de la vida cotidiana de las empresas. Frente al periodismo de despacho y de gabinete, hemos vuelto a revivir el de calle y de investigación. En estos momentos, somos el único periódico económico que ha puesto en marcha un equipo de investigación, dedicado no a perseguir ni a investigar las vidas privadas en busca del escándalo, sino a profundizar en aquellos asuntos por los que se pasa de puntillas por las prisas del día a día.

    Para cuidar la calidad de las noticias, se pide a toda la plantilla que las informaciones sean contrastadas al menos por dos fuentes de información diferentes. Eso ha permitido cumplir estos 500 números sin que jamás se haya desmentido una información de portada. Algo que comienza a ser ya una práctica habitual, desgraciadamente, en algún medio de la competencia, que presume de liderar el sector.

    Información independiente y rigurosa

    Antes de fundar elEconomista, siempre echamos de menos la información independiente y rigurosa de grandes cabeceras internacionales como The Wall Street Journal, Financial Times o nuestro socio italiano IlSole-24Ore.

    Pero es que hay más. Huimos de los cantos de sirena y del sensacionalismo, porque somos conscientes de que nuestro diario es un instrumento de trabajo con el que mucha gente se juega su dinero a diario. Y con esto, no se juega. Por ello, desde el primer día nos dotamos de un decálogo de principios, que hemos procurado cumplir a rajatabla.

    Dos de estos hacen referencia a la defensa de la libertad de mercado como uno de los pilares esenciales para favorecer el progreso social y económico de España. El otro se refiere a la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.

    La línea editorial no la marca a su capricho la dirección del periódico, sino que es supervisada y chequeada constantemente por un consejo editorial, que se reúne todos los lunes. El consejo está integrado por personas de ideologías diferentes y pensamientos contrapuestos, porque nuestra filosofía no es ser un periódico de derechas o de izquierdas, sino en defensa del libre mercado.

    Un periódico claro, sencillo y de lectura ágil

    Junto a la calidad, la otra meta que siempre ha perseguido elEconomista ha sido la claridad en sus informaciones. Claridad, por un lado, en la forma de contar historias. Día a día, nuestros redactores trabajan para explicar las informaciones de un modo que cualquiera pueda entenderlas y para emplear titulares que vayan al foco de la noticia. Desmarcándose de sus competidores, el resultado es evidente: un periódico claro, sencillo y de lectura ágil.

    Pero la claridad también está en la limpieza de nuestro diseño. Cuando se planteó cómo debía ser el arte final del diario, se consideró que debía supeditarse a un objetivo: ser completamente didáctico, atractivo y directo, sin perder la esencia del periodismo: la información, el análisis... y, en la medida de lo posible, dar un paso más. ¿Cómo se creó la imagen del periódico que ahora tiene en sus manos? La cabecera es el factor principal en una publicación. Su creador, Cruz Novillo, aportó un toque de modernidad y calidez con el tono naranja. Javier Errea, consultor de Innovation, presentó el primer prototipo del diario, en el que ya se plasmaba el espíritu innovador. El resto lo hizo el equipo de diseño liderado por Miguel Buckenmeyer.

    Nos hicimos la siguiente pregunta: ¿cómo guiar al lector a través de las páginas? Para hacerlo establecimos un código de color. Su meta: presentar la realidad tal como es, y ayudar al lector. Ante todo se evita producir cansancio visual.

    Apuesta por el color

    elEconomista es un periódico a todo color, a diferencia de sus competidores. Los colores hasta hoy establecidos por este diario son el naranja (sección de Opinión), el azul (Empresas), el rojo (Mercados), el verde (Economía) y el amarillo (Gestión). Ellos le dicen al lector dónde se encuentra y qué tipo de información le ofrecen esas páginas. El secreto del éxito no está sólo en el código de colores; también aplicamos una tonalidad acorde en los gráficos e ilustraciones de cada sección. Un trabajo minucioso para que este periódico no sólo tenga buenos contenidos, sino también el mejor continente.

    El resultado de este esfuerzo: los premios. elEconomista ha recibido dos años consecutivos el galardón al periódico mejor diseñado de España y Portugal en la franja de 20.000 a 50.000 ejemplares dela SNDe (Sociedad Española de Diseño).

    También ha sido Plata a la mejor portada por Dimisiones a la vista, donde la mirada de Manuel Conte recorre portada y contraportada. Y Plata al mejor portfolio de infografía, así como menciones especiales a las portadas realizadas con Bart Simpson y Paris Hilton, así como a varias portadas del suplemento elEspecial.

    elEconomista.es arrasa en innovación

    Calidad, claridad... ¡e innovación! elEconomista apostó desde el principio por una página web potente y, desde luego, se han cumplido nuestros mejores augurios. Desde el pasado mes de junio, eleconomista.es es el portal económico más consultado, con más de 800.000 visitantes únicos al mes, según Doubleclick. Y eso que es más joven que el diario impreso (tiene un año y medio de vida). Joven pero muy bien preparado, ha adelantado a todos sus competidores sin mirar atrás. Uno de sus puntos de apoyo: su diseño. Un diseño que la SND también ha sabido apreciar. La web de este diario fue finalista en la categoría de web mejor diseñada de España y Portugal y fue mención del jurado por sus útiles fichas de empresa.

    Pero nuestro éxito, y eso lo tenemos muy claro, se lo debemos a nuestros lectores. Ellos han conseguido que hoy seamos el segundo periódico económico más vendido en los quioscos y que sigamos cuidando este diario con la misma ilusión que el primer día. Desde estas páginas, cuando cumplimos 500 días, aprovechamos para compartir nuestro éxito con ustedes.