Airbus quiere aumentar pagos en dólares incluso a quienes compren sus plantas
París, 8 oct (EFECOM).- El fabricante aeronáutico europeo Airbus quiere aumentar los pagos en dólares a sus proveedores para hacer frente al riesgo de divisas, y hacerlo incluso con las empresas que compren las plantas que va a ceder.
Airbus confirmaba hoy así una información revelada por la revista alemana "Witschaftwoche", según la cual la política de pago en dólares afectaría a las fábricas de Nordenham, Varel, Laupheim y Ausburgo que el grupo europeo va a vender en Alemania.
Una portavoz de la compañía recordó que la compra de componentes en dólares es una política en la que se quiere seguir avanzando para disminuir el impacto de la devaluación del dólar respecto al euro.
En el diseño del programa para el nuevo avión A350 se había marcado el objetivo de superar el 50% de las compras en dólares, que era el nivel hasta entonces.
Airbus tiene buena parte de sus costos en euros debido a su implantación en Europa, pero el mercado de los aviones funciona en dólares sin que se vislumbre un cambio.
En los componentes que compra para sus aviones, el fabricante ya paga un 90% en dólares y el objetivo es que en los nuevos contratos esa proporción suba hasta el 100% y esa misma regla podría aplicarse a las factorías en proceso de cesión dentro de la filosofía de compartir riesgo con los nuevos propietarios.
Por cada diez céntimos que pierde la divisa estadounidense frente a la moneda única europea, el fabricante aeronáutico europeo pierde 1.000 millones de euros.
Por otra parte, Airbus señaló que espera determinar quién se quedará con las factorías que ha puesto en venta de aquí a finales de año.
La empresa decidió ceder, además de las citadas plantas alemanas, las francesas de Méaulte y Saint-Nazaire y la británica de Filton.
Esa operación forma parte de las medidas de ajuste decididas para compensar el impacto negativo de los retrasos industriales en el programa del avión gigante A380.
Otra de las medidas de mayor calado de dicho plan de reestructuración, bautizado "Power 8", es la supresión de 10.000 empleos en Europa. EFECOM
ac/prb