El asedio del Ejército libio afecta al suministro rebelde
La OTAN y la Unión Europea estaban considerando imponer una zona de exclusión aérea para impedir a las fuerzas leales a Muamar Gadafi usar sus aviones y helicópteros contra los insurgentes, que se han hecho con el control de algunas ciudades en el este y oeste de la capital Trípoli.
Un combatiente dijo que los rebeldes habían retomado durante la noche el corazón de Zauiya, la ciudad más cercana, a 50 km, de la capital, principal bastión de Gadafi. El centro pareció cambiar de manos en dos ocasiones durante el día en una ardua batalla.
"Luchamos hasta después de las tres de la madrugada. Todo está tranquilo aquí esta mañana", dijo el insurgente, llamado Ibrahim, en una declaración telefónica.
Mohamed, un libio que vive en el exilio y que el jueves por la mañana acudió a ver a un familiar en las afueras de Zauiya, dijo que simplemente no estaba claro quién estaba ganando la batalla por la ciudad.
"Ayer (los simpatizantes rebeldes) intentaron llevar comida y medicinas desde Subratha pero fracasaron. Las tropas del Gobierno rodean Zauiya por todas partes", dijo.
"No está claro quién controla el centro. Cambia todo el tiempo. Son combates calle a calle".
Analistas militares creen que Gadafi podría centrarse en sofocar la revuelta hacia el oeste antes de ir hacia el este, donde la ciudad rebelde de Misrata, que según los rebeldes ha estado tranquila los últimos días, sería la primera en el camino.
"Las fuerzas de Gadafi están rodeando las afueras de la ciudad. Sufrieron una gran derrota en Misrata. Pero tienen armas pesadas", dijo un insurgente. "Estamos listos para defender cualquier ataque que lancen incluso aunque sepamos que va a ser a un alto precio".
Cerca de Bin Jawad, a unos 525 km al este de Trípoli, los rebeldes lanzaron cohetes al mar el jueves después de conocerse informaciones de que embarcaciones militares podrían haber bombardeado las posiciones rebeldes en esta región productora de petróleo.
INTERVENCIÓN
El Pentágono dijo que estaba preparando una "gran variedad" de opciones militares para Libia, incluida una zona de exclusión aérea. Los planes se discutirán en una reunión de ministros de la OTAN en Bruselas el jueves. Responsables militares señalaron que esta iniciativa podría establecerse rápidamente.
Las fuerzas rebeldes han pedido a Washington y sus aliados que impongan una zona de exclusión aérea para impedir que las fuerzas de Gadafi cuenten con la ventaja de sus aviones de guerra e impedirles trasladar tropas en helicópteros.
Italia, cuyas bases podrían tener un papel decisivo en una acción militar, ha dicho que respaldará cualquier decisión tomada por la OTAN, la UE o Naciones Unidas, allanando el camino para que las fuerzas navales estadounidenses basadas en Nápoles sean desplegadas de ser necesario.
Los contraataques de los leales a Gadafi sugieren que el líder, que lleva en el poder cuatro décadas, no se irá de forma tan rápida como hicieron los dirigentes de Egipto y Túnez ante el levantamiento popular que está sacudiendo el mundo árabe.
Un incremento de los enfrentamientos parece haber cimentado la división de este país exportador de petróleo, el cuarto mayor de África, en una zona occidental tomada por el Gobierno en torno a Trípoli y una región oriental en manos de rebeldes desarrapados pero decididos.
Uno de los hijos de Gadafi ha advertido de una guerra civil entre las tribus libias si su padre dimite.
Los ministros de Exteriores de la UE hablarán sobre el norte de África en Bruselas hoy, centrándose en cómo se pueden apoyar los procesos de transición en Egipto y Túnez, usando sanciones y otros medios para presionar a Gadafi.