Empleados de Nueva Rumasa se manifestarán por lo que se les adeuda
Trabajadores de Nueva Rumasa se manifestarán en Madrid el próximo 12 de marzo convocados por CCOO y UGT para reclamar a la familia Ruiz-Mateos los más de tres millones que adeuda a los empleados de las empresas agroalimentarias, así como defender los aproximadamente 5.000 puestos de trabajo que integran su plantilla.
El secretario de Política Industrial de CCOO, Jorge Tomé, consideró "imposible" que se pueda salvar la situación actual de la empresa si se mantiene su dirección y confió "firmemente" en los mecanismos de actuación fiscal y monetaria para defender los derechos económicos de los trabajadores.
Por lo que reclaman un administrador general, que sea capaz de "pensar en la reactivación, pues no tiene ni la cualificación ni la capitalización necesarias para reflotar la compañía y si se pierde este tiempo se corre el riesgo de perder el tejido industrial y laboral", ha manifestado Tomé.
"Aquí ha habido mucho de estafa y mucha usurpación de derechos económicos de los trabajadores y de muchas personas", ha asegurado el secretario sindical.
Por su parte, el secretario general de la Federación Agroalimentaria de UGT, Jesús García Zamora, cifró en más de tres millones de euros lo que le adeuda Nueva Rumasa a los trabajadores de las empresas agroalimentarias, así como ha aseverado que están analizando todas las acciones legales a emprender, "sin descartar ninguna en ningún ordenamiento jurídico".
Inspección de trabajo
Entre otras medidas, reclaman que se lleve a cabo una inspección de los centros de trabajo, con el propósito de obtener información económica que los representantes sindicales han requerido y que no se les ha sido entregada.
Durante la comparecencia, los delegados de UGT repasaron la situación de los diferentes centros de trabajo, que en el caso de Royne y de las plantas de Clesa en Sevilla y Madrid tienen la producción parada, según indicaron. Así, temen que si prosigue la falta de materia prima, en dos semanas "la actividad sea nula" en todos los centros.
Imposible cubrir la demanda
En Carcesa, propietaria de Apis y Fruco y fabricante de marcas blancas, la falta de materia prima ha provocado que no se pueda cubrir la demanda y que se haya avisado a la distribución de que "no salen a vender para no incurrir en una ruptura de stock", por lo que en algún caso se ha exigido a Nueva Rumasa el pago de una penalización.
Además, indicaron que Tetrapack ha dejado de suministrar por impagos a la planta de Cacaolat en Zaragoza, que ha perdido el 45% de sus clientes, y que en Hibramer los transportistas "se niegan" a repartir el producto final.
Contacto con el Gobierno
Además, las organizaciones sindicales se han entrevistado con representantes del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino para manifestarles su preocupación por la situación del grupo y, según Tomé, la postura de las autoridades es "ambigua" y "prudente".