Número 2 Gescartera cree imposible se apropiara 27 millones y apunta Camacho
Madrid, 26 sep (EFECOM).- El antiguo consejero y director general de Gescartera, José María Ruiz de la Serna, afirmó hoy que "es imposible" que se apropiase de más de 27 millones de euros de los clientes de Gescartera y apuntó al dueño de la agencia de valores, Antonio Camacho, puesto que llevaba la gestión de la compañía.
En la quinta sesión del juicio oral por este escándalo financiero en la Audiencia Nacional, también declaró el acusado Anibal Sardón que, al igual que Ruiz de la Serna, no ofreció documentos sobre el paradero de los 50 millones de euros del agujero patrimonial atribuido a la agencia de valores en el momento de su intervención el 14 de junio de 2001.
Sin embargo, a juicio de Ruiz de la Serna, no puede existir este agujero patrimonial porque buena parte del dinero de los clientes puede estar fuera de España, en destinos como EEUU o la Isla de Man (Gran Bretaña), donde podría estar supuestamente en las 263 cuentas secretas ligadas a Camacho, según dejó entrever el antiguo consejero de Gescartera.
Además de atribuir a Camacho la responsabilidad de lo ocurrido y negarse a contestar a las preguntas de su abogado, Miguel Bajo, so pretexto de haberle llamado "ladrón" y "estafador", Ruiz de la Serna aseguró que desde 1998 hasta 2001 se ingresaron más de 4.500 millones de clientes (27,04 millones) y se devolvió hasta tener un saldo negativo a favor de los inversores por 15 millones de euros (2.500 millones de pesetas).
Por tanto, en su opinión, no pudo haber estafa por su parte, ya que, además, "el único interlocutor válido ante la CNMV era Antonio Camacho", a quien desde el organismo regulador se le advirtió para que repatriase los fondos relacionados con los inversores.
Ruiz de la Serna reveló además que Camacho aludía "machaconamente" a estos fondos en el exterior en HSBC y habló de ellos, hasta en tres ocasiones: en una reunión de los comerciales de Gescartera en el hotel Palace, en un encuentro en casa del financiero Alberto Cortina con el empresario Massoud Zandi y, finalmente, en una comida de negocios con otros imputados como Carlos Ortí, Julio Rodríguez y Alberto Fernández Ameneiro.
"Antonio Camacho nos dijo: no os preocupéis, yo llevo la gestión y hay dinero" para Gescartera, respondió Ruiz de la Serna a las preguntas de su defensa, después de haber reconocido la existencia de un sistema de testaferros que repartía minusvalías económicas (plusvalías fiscales) a "clientes especiales" y un grupo de "operaciones cruzadas" entre inversores, bajo once criterios diferentes.
También rebatió la declaración efectuada el lunes y el martes por Camacho en el sentido de que Ruiz de la Serna, como director general, tomaba las decisiones en Gescartera, ya que -añadió- esta es "la cuarta versión" que ha escuchado del dueño de Gescartera.
"La primera fue que yo me había llevado todo el dinero de Gescartera (tras la intervención); la segunda, en agosto, que el dinero lo había perdido su padre (...); la tercera, en marzo (de 2002), que los directivos hicimos una 'merienda de negros' y, ahora, la cuarta para decir que él estaba sacando a la empresa adelante a través de usureros; es otra versión más", concluyó Ruiz de la Serna.
A preguntas del fiscal y de las acusaciones particulares y populares, el antiguo consejero y director general de Gescartera recordó varios momentos en los que Camacho, señalado en múltiples ocasiones por él durante su declaración, barajó la traída de fondos desde el extranjero.
Uno de ellos fue cuando se decide eliminar la red de testaferros, "que costaba muy caro todos los años", y se decide constituir la sociedad "Martin Investments", de la que dependerían otras tres compañías domiciliadas en EEUU (concretamente en Belice, Georgia y Denver) para gestionar la entrada, salida y los rendimientos de los clientes.
También relató que Camacho cotejó y mandó certificar que había más de 15.000 millones de pesetas en el exterior, que se podrían repatriar a través de esta sociedad instrumental, al igual que ocurrió en ocasiones anteriores, cuando se presentaron certificados "inveraces" con el membrete de La Caixa y Banco Santander por un montante superior a los 41 millones de euros.
Incluso, según Ruiz de la Serna, el día siguiente a la entrada de Camacho en la cárcel madrileña de Soto del Real, el 17 de julio de 2001, se reunió, entre otros, con el empresario iraní Massoud Zandi, su actual mujer Laura García Morey y el comercial José María Fernandez Ameneiro para intentar utilizar fondos depositados en las cuentas del dueño de Gescartera en la Isla de Jersey.
El juicio se reanudará el próximo lunes con la declaración de Anibal Sardón, a quien comenzó a interrogar hoy brevemente el fiscal, y de otros imputados como Javier Sierra de la Flor. EFECOM
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