El banco de Caja Madrid podrá excluir algunos activos en su salida a bolsa
El consejo de administración del Banco Financiero y de Ahorros ha aprobado la ampliación del contrato de integración para facilitar su salida a bolsa. Esta medida ha sido aprobada previamente por los consejos de administración de todas las cajas integrantes de la entidad: Caja Madrid, Bancaja, La Caja de Canarias, Caja de Ávila, Caixa Laietana, Caja Segovia y Caja Rioja, según hechos relevantes comunicados a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Las entidades ha acordado que se puedan excluir de la sociedad que quiere sacar a bolsa algunos activos para que la operación tenga más valor y sea más atractiva para los inversores.
La posibilidad de excluir algunos de los activos del nuevo grupo, "con el fin de optimizar su atractivo para los inversores y su valoración", abre la puerta a que el Banco Financiero de Ahorros pueda crear un banco malo, si así lo decide, en el que podrían estar por ejemplo algunos de los activos inmobiliarios.
La operación se asemeja a lo anunciado hace unos días por La Caixa que agrupará, por un lado, los activos inmobiliarios además de alguna participación industrial mientras que, por otro, el grueso del negocio bancario estará bajo el paraguas de Caixabank.
En concreto, la salida a bolsa del Banco Financiero y de Ahorros, que ya se contemplaba en el contrato de integración, contribuirá a reforzar la solvencia, permitirá ampliar su base accionarial y dotar de un mercado líquido a los accionistas presentes y futuros del grupo.
Las medidas adoptadas para su salida a bolsa no conllevarán ningún cambio en la relación de las cajas de ahorros integrantes del SIP con sus clientes, que mantendrán su operativa habitual con su entidad de referencia.