Empresas y finanzas

El 'lobby' inmobiliario cree que el sector irá peor de lo previsto

    La patronal formada por los promotores se muestra pesimista con el sector. <i>Foto: eE</i>


    La nueva asociación del sector inmobiliario, que pasará a llamarse Grupo de Inmobiliarias por la Excelencia, sigue moviendo ficha para defender su imagen ante el panorama negro que acecha sobre el sector. Según explican en un informe, la desaceleración del mercado será más intensa y larga, aunque no se asemejará al panorama de los años 90.

    Una de sus herramientas es un informe que ha realizado la firma Analistas Financieros Internacionales bajo la dirección de Emilio Ontiveros y Angel Berges. Según ese documento, la desaceleración del mercado inmobiliario español será mayor de lo previsto inicialmente como consecuencia de las crisis de las hipotecas basura en Estados Unidos.

    Sin alarmas

    Este futuro escenario no será alarmante, ya que no rozará los límites de la desaceleración de comienzos de los años 90. "Las previsiones de moderada desaceleración deben sustituirse por otras dominadas por una intensidad y duración del ajuste algo mayores", indica el estudio.

    ¿El motivo? Las reglas del juego han cambiado como consecuencia de un cambio estructural en las condiciones de financiación, tanto en volumen como en coste, ante la actual crisis de liquidez. A este escenario hay que añadir la crisis de confianza en relación al mercado inmobiliario, el endurecimiento de las condiciones de los préstamos al sector y la dependencia exterior del sistema financiero para financiar el crecimiento del crédito.

    Otro de los puntos que deja muy claro el informe es que las diferencias entre el mercado hipotecario español y el estadounidense son "suficientemente elocuentes" como para descartar un riesgo de hipotecas basura en España.

    El peor enemigo, la desconfianza

    Según el lobby, la desconfianza generalizada respecto a qué entidades financieras están salpicadas por la crisis de los préstamos de Estados Unidos es la que puede dañar el sistema hipotecario español, pues "está suponiendo el cierre del grifo de la financiación exterior".

    "Este es el más peligroso efecto colateral de las hipotecas subprime sobre el mercado inmobiliario español y, por ende, sobre el crecimiento económico y la creación de empleo en el país", advierte el G-14, que reconoce que aumentará la tasa de morosidad ante el cambio de ciclo pero será una tendencia menos intensa que la que se está produciendo en el mercado estadounidense.

    La patronal reune a empresas como Martinsa-Fadesa, Metrovacesa, Nozar, Rayet, Realia, Reyal Urbis, Sacyr Vallehermoso, Colonial, Chamartín o Restaura, y está presidida por Fernando Martín.