PIMCO reduce considerablemente su exposición a la deuda de EEUU
Que Bill Gross, director de inversiones en Pacific Investment Management Co, la mayor gestora privada de bonos, no confía en la responsabilidad fiscal de Estados Unidos es un secreto a voces. Si Gross tachó hace unas semanas las políticas de Ben Bernanke y la Reserva Federal como "diabólicas", ahora PIMCO comienza a tomar cartas en el asunto al reducir su exposición en la deuda del país.
De hecho, el pasado mes de enero, la entidad redujo considerablemente todas sus inversiones en distintos instrumentos de deuda, como bonos del Tesoro, del gobierno norteamericano. Así según los datos dados a conocer, PIMCO redujo hasta el 12% su exposición a EEUU, desde el 22% registrado en diciembre y su menor exposición a este tipo de productos desde febrero de 2009.
Además, los cambios realizados en el Pimco Funds Total Return Fund, muestran como, por ejemplo, sus inversiones en activos respaldados por hipotecas cedieron ligeramente hasta un 42%, desde el 45% del mes anterior, o su exposición a la deuda de mercados emergentes se mantenía intacta en el 9 por ciento.
Esta no es la primera caída en la exposición del fondo a los instrumentos de inversión en deuda norteamericana. Si echamos un vistazo a los datos publicados en su página web, la exposición a bonos del Tesoro, activos protegidos contra la inflación además de sus opciones de compra y futuros sobre bonos del Tesoro disminuyeron sensiblemente durante el último mes de 2010 hasta 22% en diciembre desde el 30% registrado en noviembre del año pasado.
Un déficit crónico
En un nuevo informe publicado a comienzos de año, Gross advirtió justo el día en que los republicanos tomaron el control de la Cámara de Representantes que "ni los ciudadanos ni los políticos son capaces de entender las consecuencias un déficit que se sitúa de forma crónica por encima del billón de dólares". Para el director de PIMCO, EEUU se ha convertido en una mantis religiosa que "se alimenta de las cabezas de generaciones venideras".
Hace un par de semanas, en un nuevo documentos, Gross perfiló a varios escenarios en los que los tenedores de bonos podrían quemarse. Los riesgos incluían desde impagos de deuda soberana, devaluación de las divisas, inflación y bajos retornos en comparación con otra clase de activos.
Básicamente, Gross comparó a Bernanke y los gobernadores de otros bancos centrales con el diablo y denominó sus políticas de intereses a cero como una herramienta diabólica. "Este trabajo no ha sido realizado por los dioses, tiene el hedor característico del demonio", aseguró.
De hecho, el empleado de PIMCO echó piedras contra su propio tejado al afirmar que "como profesión, hemos fallado miserablemente en nuestra función: la inversión de capital de forma eficiente y productiva". Desde su punto de vista, el 80% de los gestores de fondos generaron beneficios muy por debajo de la evolución de los principales indicadores.