El Banco de España pide a las entidades financieras que eleven sus provisiones ante el riesgo inmobiliario
Por ello, el Banco de España ha alertado a bancos y cajas sobre las provisiones que mantienen, es decir, ha hecho hincapié en la cobertura que tienen en caso de impago, y les ha pedido que eleven este colchón.
Y es que para el Banco de España es fundamental el hecho de que el volumen de crédito hipotecario gestionado por bancos y cajas esté en su nivel más bajo en cuatro años. Igualmente, resulta clave que las sociedades y servicios de tasación hayan realizado 1.802.000 operaciones en 2006, un 1 por ciento menos que en 2005 y la primera caída desde 2003. Y, finalmente, que ayer mismo el Banco Internacional de Pagos avisara de que la banca española es la más expuesta a una crisis inmobiliaria.
El momento ideal
Además, el banco supervisor opina que el momento de realizar esta maniobra es el ideal, puesto que los beneficios obtenidos por las entidades financieras en los últimos ejercicios y, más concretamente en 2006 y el primer semestre del año en curso, permiten afrontar con tranquilidad el incremento de las provisiones.
Así, cabe recordar que los bancos rozaron el 28 por ciento en el crecimiento de sus ganancias, mientras que las cajas de ahorro casi llegaron al 50 por ciento.
Asimismo, el parón inmobiliario es, por ahora, un "suave aterrizaje" -como han deseado la mayoría de banqueros implicados- y reforzar la provisiones ahora puede ser interesante por si las moscas.
Menor exposición al sector inmobiliario
Por su parte, las entidades financieras ya están sobre aviso en ese sentido. No sólo mantienen en la actualidad un nivel de provisiones por encima del mínimo legal y que supera las cifras de sus homólogas europeas, sino que además están haciendo todo lo posible para frenar su dependencia de la construcción. Tan es así, que la mayoría de ellas ha reducido voluntariamente su cuota en el mercado inmobiliario, sobre todo, en lo referido a promotores.
El objetivo es recortar al máximo su exposición al riesgo frente a la actividad de estos. Por citar un ejemplo, el Popular ha pasado de tener en 2005 un 5,6 por ciento en relación a sus competidores al 4,25 actual.
En cualquier caso, entre la gran banca, los créditos a particulares se salvan por ahora del cierre de grifo a los promotores, tal y como han manifestado la mayoría de sus directivos en las recientes presentaciones de resultados semestrales.