Activistas judíos navegan rumbo a Gaza en desafío al bloqueo
Nueve activistas de Israel, Reino Unido y Estados Unidos zarparon desde Famagusta, en el norte de Chipre, con una pequeña cantidad de ayuda en el catamarán de bandera británica "Irene".
Sin interrupciones de por medio, la nave llegaría a Gaza en unas 24 horas.
"Quiero levantar mi voz contra la maldad y atraer la atención hacia 1,5 millones de personas que viven bajo sitio. Es inhumano", dijo Rami Elhanan, activista israelí que perdió a su hija de 14 años por un ataque suicida palestino en 1997.
Israel, cuyas políticas hacia Gaza han estado bajo escrutinio mundial desde que un grupo de comandos navales matara a nueve activistas turcos a bordo de un barco el 31 de mayo, calificó la misión del Irene como una "provocación".
"Si fueran serios en sus intenciones de llevar ayuda a Gaza, podrían hacerlo fácilmente tras pasar una revisión en busca de armamento escondido", dijo Andy David, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí, refiriéndose a los puertos en Israel e Egipto que reciben suministros para los palestinos.
Preguntado sobre si el Ejército israelí intentaría detener o interceptar a los activistas, David no quiso hacer comentarios.
"Israel no tiene fronteras morales", dijo Reuven Moskovitz, de 82 años y superviviente del Holocausto.
"Yo voy porque soy un superviviente. Cuando estaba en un gueto y casi morí, esperaba que hubiera seres humanos que mostraran algo de compasión y ayudaran", explicó Moskovitz.
Chipre está a 354 kilómetros de la costa de Gaza y ha sido usada como punto de partida para el envío de ayuda con anterioridad.
Famagusta también tiene un significado especial para el pueblo judío.
Entre 1946 y 1948, cientos de judíos estuvieron encerrados en campos en Famagusta - cuando Chipre era una administración colonial británica -, en su intento por llegar a lo que entonces era conocido como Palestina, también bajo el dominio británico.