Empresas y finanzas
Bank of América reconoce que varias operaciones maquillaron su deuda
Bank of America, la entidad bancaria más grande de Estados Unidos por activos, entonó el mea culpa ante la Comisión de Mercados y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) y reconoció haber errado a la hora de realizar un total de seis operaciones que ocultaron miles de millones de dólares de su deuda justo antes de tener que cumplir los objetivos financieros internos impuestos por la propia compañía.
Un hecho que vuelve a poner en duda las artimañas contables de muchos bancos, que podrían maquillar sus niveles de deuda de cara a la galería y evitar así posibles represalias, tanto de la opinión pública como de los reguladores a este lado del Atlántico.
Según adelantó The Wall Street Journal, el banco escribió una carta a la SEC como parte de la investigación que la agencia lleva a cabo entre las principales entidades bancarias del país con el objetivo de determinar el impacto en sus cuentas de los coloquialmente conocidos como repos, es decir, pactos temporales con venta de recompra. La misiva, enviada el pasado mes de abril, detallaba que un total de seis operaciones realizadas justo antes de terminar varios trimestres fiscales entre 2007 y 2009 eran incorrectas.
Bajo estas circunstancias, la SEC cuenta con una prueba más que podría sustentar los indicios que apuntan que muchos bancos podrían disfrazar sus cuentas al cierre de sus trimestres fiscales, reduciendo temporalmente su deuda. El rotativo financiero ya puso de manifiesto que este tipo de prácticas, conocidas en la jerga contable como window dressing, ocultan fácilmente su riesgo tanto a sus clientes como inversores.
Así, los bancos venden un activo y se compromete, transcurrido un plazo establecido (menor de un año), a recomprarlo a un precio fijado de antemano.
Al borde la legalidad
Aunque, a simple vista, estas operaciones contables no son ilegales en EEUU, el ocultar intencionadamente cifras a los accionistas sí puede ser castigado por la ley y los reguladores. Por eso, Bank of America dejó claro en su carta a la SEC que sus errores contables "no fueron intencionados".
La compañía explicó que confundió la clasificación de algunos de sus repos a corto plazo como ventas en lugar de préstamos, algo que ocurrió "con la intención de cumplir los objetivos trimestrales internos".
Los repo son técnicas perfectamente legítimas, incluso el propio Eurosistema echa mano de estas operaciones para instrumentar la política monetaria. Al tratarse en definitiva de una operación de financiación garantizada, el tratamiento contable que debe asignársele se asimila a un préstamo recibido, pero algunos bancos lo catalogan erróneamente como una venta.
Este tipo de tácticas son similares a las empleadas por Lehman Brothers, que utilizó el conocido como repo 105 para mejorar de cara al exterior su balance de cuentas, pese a que la compañía se vió obligada a quebrar durante el momento álgido de la crisis subprime. A través de estos repos, el banco conseguía efectivo, sin que tal financiación quedase reflejada en el balance. Sin embargo, de esta manera no se reducía el apalancamiento como tal, ya que era necesario realizar un segundo paso. Una vez recibido el efectivo, Lehman amortizaba las deudas a corto plazo.