Empresas y finanzas

UE da mañana otro paso hacia la bajada de llamadas de móvil en itinerancia



    Luxemburgo, 6 jun (EFECOM).- Los Veintisiete dan mañana un nuevo impulso a la bajada de hasta un 70 por ciento en las tarifas para utilizar el teléfono móvil al viajar por la Unión Europea, medida que entrará en vigor el 1 de julio, aunque las empresas tendrán dos meses para aplicarla.

    El Consejo de ministros de Energía, Transporte y Telecomunicaciones centrará su segunda jornada en las tarifas telefónicas, la liberalización de servicios postales y la navegación marítima, tras haberse ocupado hoy de la separación de los mercados de gas y electricidad.

    El reglamento sobre "roaming" obligará a las compañías a que el coste sin IVA que afronte un consumidor cuando llame por móvil desde un país de la UE distinto al de origen no exceda 49 céntimos por minuto en 2007, 46 céntimos en 2008, y 43 céntimos en 2009.

    El precio actual de las llamadas en itinerancia oscila entre un euro y 1,25 euros por minuto, según una encuesta realizada por la Comisión Europea en 2006.

    La norma también prevé la reducción progresiva de la factura cuando el consumidor recibe llamadas en el extranjero -máximos de 24 céntimos en 2007, 22 en 2008 y 19 en 2009-.

    El reglamento no se aprobará definitivamente mañana, como estaba previsto, y por la necesidad de cubrir una serie de procedimientos administrativos será el Consejo de Competitividad del 25 de junio el que dará su visto bueno definitivo.

    España no simpatiza especialmente con la bajada aprobada, ya que será el país más perjudicado al dejar de ingresar gran parte del pago de las llamadas en itinerancia de los millones de turistas que la visitan cada año.

    Sin embargo, sus compañías deben afrontar fuertes inversiones en infraestructuras para soportar un tráfico telefónico que se multiplica con este turismo.

    Por este motivo, junto a Gran Bretaña y Francia, trató de retrasar, sin éxito, la aprobación del reglamento para cuidar al máximo su seguridad jurídica.

    No habrá ningún alto cargo enviado especialmente por el gobierno de España durante el debate en el que defenderá el proyecto la comisaria europea de Telecomunicaciones, Viviene Reding, y estará representada por el embajador, Carlos Bastarreche, según fuentes diplomáticas.

    La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, sí asistirá poco después al debate sobre la liberalización de los servicios postales, así como a las deliberaciones sobre transporte marítimo.

    La introducción de más competencia en el sector postal plantea problemas más sociales y políticos que técnicos, ya que con 1,5 millones de trabajadores directos y otros 5 millones indirectos en toda Europa, la privatización podría acarrear grandes movilizaciones sindicales.

    Según fuentes diplomáticas, este no sería el caso de España, donde el número de empleados es de 60.000 -frente a 200.000 polacos, italianos o franceses- y donde la empresa Correos "se ha adaptado" a los cambios logísticos que supone una sociedad cada vez menos dependiente de los envíos tradicionales.

    Por ello, Madrid tiene un papel "cómodo" y de "árbitro", ya que se encuentra en un punto intermedio entre los más renuentes (Francia e Italia) y los que quieren privatizar cuanto antes los servicios postales (Alemania, Gran Bretaña y Holanda). EFECOM

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