Empresas y finanzas

IGAPE aprueba ayudas proyecto 50 millones Ferrolterra tratamiento residuos



    Santiago de Compostela, 27 abr (EFECOM).- El consejo de administración del Instituto Galego de Promoción Económica (IGAPE) aprobó hoy la ayuda de 5,2 millones de euros para un proyecto de tratamiento de residuos por alta tecnología que se instalará en Ferrolterra, con una inversión de 50 millones de euros.

    El conselleiro de Economía y presidente del instituto, José Ramón Fernández Antonio, explicó en conferencia de prensa que se trata de una iniciativa de la empresa Recover Recuperación, en la que el grupo gallego Toysal participa con un 70 por ciento, que creará 26 puestos de trabajo.

    La planta, que se instalará en el municipio de As Somozas, utilizará una avanzada tecnología de gasificación por plasma, desarrollada por la multinacional estadounidense Solena Group, que permitirá el tratamiento de 45.000 toneladas anuales de residuos sólidos urbanos, hospitalarios o industriales, restos de pinturas, disolventes, PVC, aceites, neumáticos, cenizas de incineración y lodos de refinerías o estaciones de depuración.

    La tecnología, denominada PGV, siglas de su nombre en inglés (Plasma Gasification and Vitrification) consiste en calentar el aire mediante un arco eléctrico transferido hasta temperaturas extremas (más de 5.000 grados) para convertirlo en plasma, gas ionizado.

    En este estado, es proyectado sobre el flujo de residuos para conseguir una disociación de las moléculas de sus componentes orgánicos, que pasan a formar un gas de síntesis combustible, que podrá ser utilizado para la generación de electricidad.

    Los productos obtenidos en este proceso son 15,6 MW de energía eléctrica, de los que 3,8 serán para consumo propio, y un material vítreo o basalto, idóneo como material de construcción, ladrillos, cemento y otros, o como base para carreteras, elaboración de baldosas o tejas.

    Este proceso tiene, además de la ventaja de la ausencia de emisiones contaminantes, una gran versatilidad, pues aprovecha residuos tanto sólidos como líquidos o pastosos y obtiene entre 1,5 y 2,5 veces más energía que la producida en las incineradoras de última generación y produce, además, productos con valor comercial, con costes operativos y de inversión inferiores a cualquier incineradora de tamaño y capacidad similares. EFECOM

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