Empresas y finanzas

Un grupo de cajas refuta a Quintás y apoya a Fainé para presidir la CECA

    Juan Ramón Quintás


    El malestar en la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) con su presidente va en aumento. El motivo no es otro que el empecinamiento de Quintás de designar su sucesor rompiendo el protocolo de la organización. Por ello, un grupo de cajas está dispuesto a apoyar la candidatura de Isidre Fainé, presidente de La Caixa, oponiéndose así a los deseos de Juan Ramón Quintás.

    La puntilla para dar este paso ha sido la misiva que Quintás ha enviado el pasado 10 de marzo, en la que afirmaba haber incluido, a última hora, en el orden del día la "deliberación y, en su caso, nombramiento del presidente del consejo de administración".

    Sin embargo, el ofrecimiento a Fainé, que recibiría el beneplácito también de las instituciones oficiales, aún no ha sido respondido por el interesado. En fuentes financieras se señala que está demasiado centrado en su propia casa como para capitanear el reto de presidir la CECA, si bien añaden que el perfil de Fainé, con prestigio y probada capacidad negociadora, es el que se busca en esta nueva etapa. Mientras, desde La Caixa se prefiere no hacer comentarios sobre este tema

    Oposición creciente

    Alguna entidad califica de "insólito" el procedimiento de Quintás y, en su opinión, es una muestra más de que el presidente saliente tiene la pretensión de nombrar él mismo a su sucesor, "cuando esta labor corresponde a todo el consejo y no a la persona que se va". Además, señalan que a esto se une la intención de Quintás de hacer una especie de tutelaje al elegido durante un par de meses, en el que los dos ejercerían la presidencia, algo que no tiene precedentes, recalcan, y que además es irregular.

    Los mismos argumentos que utiliza Quintás para apoyar su proyecto son los que emplean sus detractores para combatirlo. El presidente de la CECA los nombra también en la carta enviada la pasada semana: "Se ha incorporado a la agenda política la reforma del régimen jurídico de las cajas y sus instrumentos de consolidación. A mi juicio, estos expedientes normativos requieren la atención urgente de un presidente que pueda afrontar plenamente una tramitación que será larga y compleja".

    Y es que lo que sostiene Quintás es que dadas las circunstancias que viven las cajas, lo aconsejable es adelantar el nombramiento y, para que no se produzca vacío, convivir con su sucesor hasta mediados de mayo, momento en que tiene que abandonar el cargo.

    Coinciden sus críticos en afirmar que el momento de las cajas es delicado. Por ello, insisten, es necesario que el nuevo presidente tengan una buena relación con el supervisor bancario, el Gobierno, la oposición y, también, los bancos. Algo que, aseguran, no cumple el actual, enfrentado con casi todos. Por ello, no consideran que Quintás sea el más apropiado para "sugerir" el nombre del sucesor y, mucho menos, que conviva con él durante un tiempo, ya que lo que se precisa es un cambio de perfil y una ruptura con la actual presidencia.

    Otra razón que esgrimen para oponerse a Quintás es que consideran que las prisas que quiere imprimir a la elección son incompatibles con la búsqueda del candidato idóneo, que incluye el sondeo entre diferentes sectores y el acuerdo sino de todas, al menos de una mayoría muy amplia de entidades.

    Hasta ahora el único nombre que se ha propuesto es Amado Franco y sobre el que nadie ha lanzado un reproche, ya que las críticas se limitan al modo en que Quintás quiere realizar la transición.

    El presidente de Ibercaja es un hombre con dilatada experiencia en el sector, responsable de una caja bien gestionada y que ha sabido resistir a la crisis. Además proviene de una entidad de mediano tamaño, de donde han salido la mayoría de los anteriores presidentes.

    Aprobación improbable

    A pesar de la inclusión en el orden del día, distintas entidades aseguran que no tienen previsto dar su visto bueno a la designación de un nuevo presidente en la reunión de hoy, si bien saben que, tras la carta de Quintás, el tema inevitablemente se abordará en la reunión.

    Lo que se prevé es que junto al nombre de Amado Franco se baraje el de otros responsables, que o bien quedarán fijados como candidatos o se acordará que la decisión formal se adopte en la siguiente reunión, próxima ya a la celebración de la Asamblea anual.

    Por la conveniencia de mostrar la mayor cohesión entre las cajas se señala que lo más probable es que se evite dar nombres, pero ello dependerá del ambiente que reine en la reunión de hoy.