Empresas y finanzas

Petrobras devuelve campo a Bolivia por riesgo de inversión y nacionalización



    La Paz, 31 mar (EFECOM).- La compañía brasileña Petrobras devolvió a Bolivia un campo de petróleo argumentando el riesgo de no poder recuperar la inversión y por el nuevo régimen tributario impuesto por la nacionalización del presidente Evo Morales, informaron hoy a Efe fuentes del sector.

    En cambio, el gobierno boliviano atribuye la devolución a que la empresa encontró petróleo, que no le interesa, en vez del gas natural que requiere.

    El campo devuelto se denomina Irenda, está en el departamento oriental de Santa Cruz, fronterizo con Brasil, tiene una extensión de 25.000 hectáreas y fue adjudicado a Petrobras en 2003 mediante una licitación pública.

    En la primera fase de exploración, Petrobras invirtió en Irenda cerca de 3,6 millones de dólares y para la segunda tenía previstos 16,6 millones más.

    Pero en vista del "alto riesgo" de que no se recupere la inversión, más los cambios que trajo la nacionalización de Morales en las condiciones tributarias y contractuales, la empresa mixta brasileña decidió devolver el campo, aseguraron las fuentes del sector petrolero.

    La devolución se produjo después de que Bolivia firmase en octubre pasado 44 contratos nuevos con 12 petroleras, que no han entrado aún en vigor porque subalternos de Morales cometieron numerosos errores -la oposición habla incluso de delitos- en su tramitación parlamentaria en noviembre.

    Actualmente se está repitiendo ese proceso y el Senado aprobó ya, en la madrugada de este viernes, 41 de las 44 leyes necesarias para ratificar los nuevos convenios, que luego pasarán a la Cámara de Diputados.

    El ministro boliviano de Hidrocarburos, Carlos Villegas, en declaraciones que publican hoy medios informativos locales, asegura que Petrobras anunció la devolución de Irenda porque allí descubrió petróleo y sólo quiere gas natural.

    A la firma brasileña "no le convienen líquidos, porque los precios, con relación al mercado internacional, son más bajos internamente", dijo Villegas, y agregó que "Petrobras está en Bolivia para descubrir y producir gas natural, fundamentalmente para exportación".

    Las inversiones en Bolivia están prácticamente paralizadas -salvo las de proyectos ya comenzados o comprometidos- debido a la nacionalización de los hidrocarburos decretada por Morales en mayo de 2006 y por numerosas crisis que aumentaron la incertidumbre en el sector desde entonces.

    En los últimos once meses han renunciado o han sido cesados un ministro y tres viceministros de Hidrocarburos, tres presidentes de la petrolera estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y tres superintendentes del sector, por escándalos o por pugnas en el gobierno.

    La devolución del campo Irenda fue comunicada el 27 de enero pasado a YPFB pero los detalles y los motivos de Petrobras sólo han sido conocidos hasta ahora.

    Petrobras retuvo otros campos, como el de Río Hondo, en una zona limítrofe de los departamentos de La Paz, Beni y Cochabamba, a pesar de que están paralizados allí los trabajos de exploración desde 2004 "por impedimentos de carácter socio-ambiental", informaron a Efe las fuentes del sector.

    También mantuvo el campo Ingre, en el departamento de Chuquisaca, con una extensión de 37.500 hectáreas, y sigue explotando los dos mayores pozos de gas natural de Bolivia, San Antonio y San Alberto, en Tarija, junto con la firma hispano-argentina Repsol YPF y la franco-belga TotalFinaElf.

    La filial boliviana de Petrobrás es la mayor empresa de este país 9,8 millones de habitantes, la mayor aportadora de ingresos al fisco, la principal exportadora y la más afectada por la nacionalización, seguida por Repsol. EFECOM

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