La integración de Unicaja y CajaSur amenaza el cierre de 200 oficinas
- El solapamiento de la red comercial alcanza el 13%
Mañana comienzan las negociaciones laborales de la fusión de Unicaja y CajaSur. Aunque fuentes cercanas a ambas entidades descartan que vuelva una fuerte tensión, como en los meses precedentes, sobre la mesa hay dos importantes y decisivos asuntos: cómo se van a producir los 1.224 despidos y cuántas oficinas se van a cerrar.
El informe elaborado por Boston Consulting, base del acuerdo de integración aprobado por sendas entidades, deja claro el número de sucursales que sobran: 194 centros comerciales como consecuencia del solapamiento; es decir, el 13% del total.
En los últimos años, el sector financiero ha llevado a cabo una política agresiva de expansión de la red para intentar arrebatar clientes a la competencia.
Ante esta estrategia la mayor parte de la duplicidad de sucursales de las dos instituciones andaluzas se produce en los dos territorios de origen, Málaga y Córdoba, y Jaén, de donde procede la otra entidad que suma al proyecto después de que este fin de semana su asamblea haya autorizado la primera integración del proceso de reordenación del sistema español como consecuencia de la crisis. En estas tres provincias, este fenómeno se da en 115 casos, siendo más pronunciado en Málaga y Jaén.
91 cierres ya previstos
El estudio, al que ha tenido acceso este periódico, añade que del total de oficinas que se solapan, 22 ya estaban incluidas en los planes individuales de cierre. Estos proyectos contemplaban la desaparición conjunta de 91 sucursales, el 7% de la red, de las que más de dos tercios están ubicadas en territorio andaluz.
Fuentes cercanas a las entidades aseguran que la intención es no llevar cabo un cierre masivo de centros y que, por tanto, éste no afectará a los casi 200 que sufren el solapamiento. Es más, agregan que se situará ligeramente por encima de los planes individuales.
La racionalización de la red comercial será clave para determinar cuál será finalmente el recorte de personal que se lleve a cabo y que se discutirá a partir de mañana, cuando se celebre la primera Mesa Laboral, a la que están invitados los sindicatos, muy críticos con el coste que tendrá la integración para los trabajadores.
Informe vinculante
Unicaja ha sido muy tajante en su postura sobre la operación y ha establecido como vinculantes los números estipulados en el informe de la consultora independiente.
Entre las cifras que ofrece se incluye la factura que tendrá la racionalización de la red comercial el primer año de la fusión. El cierre de las sucursales costará 160 millones de euros de los 402 millones que supondrá el conjunto de la operación. No obstante, también producirá ahorro de gastos, que Boston Consulting estima que ascenderán a 35 millones. Las sinergias totales de la integración alcanzarán 135 millones, principalmente por los ingresos que se generarán por los negociaciones tradicionales.
En los próximos meses, las dos entidades tendrán que definir las cuestiones laborales, con el objetivo de que en primavera se selle la fusión. Este asunto es el más espinoso y el que llevó a la cordobesa al borde la intervención inmediata, después de que su consejo de administración desautorizara el plan negocio elaborado por Boston Consulting. Tras la amenaza del Banco de España, este órgano de gobierno dio luz verde al proyecto cinco días más tarde y firmó un pacto irreversible para abordar la fusión.
CajaSur se ha visto obligada a integrarse a Unicaja ante el deterioro de su balance. Según el informe, la entidad controlada por el Cabildo Catedralicio de Córdoba perderá este año 528 millones de euros debido a la elevada morosidad de su cartera crediticia.