Empresas y finanzas

Mujeres en la City: entre leyes de igualdad y realidades comerciales



    El debate sobre igualdad que se está manteniendo estos días en el Parlamento británico deja al descubierto las dficultades que las mujeres tienen para labrarse una carrera de éxito en el mundo de las finanzas. Y parte de la culpa de que no puedan acceder a determinados puestos podría ser, precisamente, la misma normativa que pretende acabar con las desigualdades.

    Al menos esto es lo que piensa Nichola Pease, vicepresidenta y ex consejera delegada de JO Hambro capital Management, entidad que pertenece a la suiza Credit Suisse.

    Según declaró ante los miembros del Parlamento británico, a las compañías les asusta contratar a mujeres debido a que las sanciones por discriminación sexual en cargos de responsabilidad son "ilimitadas". Además, la ejecutiva considera que el elevado periodo que se concede por las bajas de maternidad, que tienen un máximo de 52 semanas, es otro obstáculo importante.

    "Un año por maternidad es demasiado tiempo, y las multas de decenas de millones por discriminación sexual son ridículas", afirmó Pease ante el Comité del Tesoro de la Cámara de los Comunes británica.

    Sueldos y responsabilidad

    Este comité también está investigando el motivo por el que las mujeres que trabajan en la industria de los servicios financieros ganan menos que sus compañeros varones, así como la razón por la que ocupan menos sillones ejecutivos.

    En abril, coincidiendo con la publicación de la nueva Ley de Igualdad, la Comisión por los Derechos Humanos señalaba en un informe que la diferencia que separaba unos sueldos de otros en el sector de la gestión de fondos y de trading podía llegar al 60% en algunos casos mientras que en los bonus este salto podía alcanzar el 79%.

    "Lo que me preocupa es que la legislación y la protección convierta esto en una pesadilla", señaló Pease, quien añadió que "tenemos que ser realistas". En su opinion, las diferencias en la remuneración son "a menudo resultado de las elecciones que hacen las mujeres".

    Prostitución: ¿realidad comercial?

    Según explicó, "aunque nos gustaría dar a todos un trabajo flexible, algunos empleos requieren dedicación a tiempo completo, muchos viajes y congresos antisociales, y esas son las realidades comerciales". "Necesitamos vivir como un país con esas realidades comerciales", añadió.

    Sin embargo, poco antes Kat Banyard, de la Sociedad Fawcett para la promoción de la igualdad de género, hablaba de otras realidades comerciales distintas. De acuerdo con Banyard, en la City se está convirtiendo en una práctica cada vez más habitual recurrir a prostitutas para entretener a sus clientes y condimentar negociaciones.

    Para argumentar su declaración ante el Comité del Tesoro, la sociedad presentó numerosos testimonios de empleadas de entidades bancarias y financieras como prueba de unas prácticas que "crean un entorno laboral muy hostil" para las mujeres. "Es preciso que el sector financiero abandone estas prácticas si queremos incrementar la presencia femenina en la plantilla de las empresas del sector", señaló.