México decreta la liquidación de la compañía estatal de electricidad en la capital
El gobierno mexicano decretó el domingo la liquidación de la compañía de Luz y Fuerza, con unos 40 mil trabajadores, que abastece de electricidad a la capital mexicana y municipios aledaños, por considerar que los costos de la empresa representan una carga para el erario público.
"Se extingue el organismo descentralizado Luz y Fuerza del Centro, el cual conservará su personalidad jurídica exclusivamente para efectos del proceso de liquidación", publica este domingo el Diario Oficial de la Federación.
Los costos que genera la empresa casi duplican a los ingresos por sus ventas en la capital y municipios aledaños en donde viven más de 20 millones de habitantes, justifica el diario oficial.
"La policía federal está resguardando las instalaciones de la compañía de Luz y Fuerza del Centro en la Ciudad de México", dijo el sábado por la noche a la AFP un portavoz de la Secretaría de Seguridad Pública.
Más de 500 policías federales arribaron a las 22:30 horas (03:30 horas del domingo en España) a las instalaciones de la empresa, ubicada en un barrio céntrico de la capital. Entraron de forma pacífica donde se encontraban trabajando sus empleados, indicó por su parte el periódico El Universal en su portal de internet.
El servicio eléctrico se mantuvo sin alteraciones en la metrópoli.
Por su parte, el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) se mostró sorprendido por la medida y dijo que ofrecerá una postura en las próximas horas.
La empresa entró en conflicto hace unos días cuando el ministerio del Trabajo desconoció la elección del nuevo líder del Sindicato Mexicano de Electricidad (SME), Martín Esparza, por haber supuestamente ocurrido en medio de irregularidades.
En respuesta, más de 15.000 miembros del SME, que cuenta con 40.000 agremiados, realizaron el jueves pasado una marcha por importantes avenidas de la capital hasta la residencia oficial de Los Pinos, para denunciar injerencia del gobierno en la vida interna del sindicato y amenazaron con llamar a una huelga.