Cuidado con las hipotecas 'montaña': Créditos que allanan el camino al principio y luego suben y suben...
Llegan a convertirse para algunos en lo más parecido a una hipoteca subprime. Y las tenemos en España. Se trata de productos en absoluto problemáticos en sí mismos. Es más, el objetivo que persiguen en principio es "intentar favorecer el acceso a las hipotecas", como explican fuentes del sector. ¿Cómo? Pagando menos los primeros años, cuando hay que hacer frente a grandes desembolsos de dinero.
"Son productos diseñados para un sector, jóvenes parejas por ejemplo, con buenas expectativas económicas de futuro". ¿Pero qué ocurre cuando éstas se truncan? Que las cuotas, lejos de seguir siendo cómodas, pasan a ser más elevadas e incluso se termina pagando más por la hipoteca. Y es que los periodos de carencia parcial o total, la cuota fija o creciente pueden constituir una trampa para aquellos que no tengan en cuenta la letra pequeña.
En el periodo de carencia las cuotas del préstamo se ven reducidas sensiblemente, dado que sólo se pagan intereses y no se amortiza capital. Suele ser de dos años, los iniciales, como sucede en la hipoteca Oportunidad de Barclays, o en la 049 de Caixa Geral, dos de las entidades que ofrecen esta opción. ¿Qué ocurre durante ese lapso de tiempo? No se amortiza ni un sólo euro del préstamo. Es decir, y para que se entienda, el capital pendiente de devolver no disminuye, y cada mes pagará religiosamente los intereses.
En un ejemplo práctico
En un ejemplo práctico, si se suscribe un préstamo por 200.000 euros a 20 años y a un tipo de interés del 5 por ciento, pagando una cuota durante el periodo de 1.319 euros, terminará abonando 116.778 euros de intereses.
Con una carencia de dos años, sin embargo, en este periodo inicial sólo pagará 833 euros de cuota mensual, que luego se convertirán en 1.406 euros. En total, abonará 123.710 euros de intereses, casi 7.000 euros más totales. Las hay incluso que hasta difieren totalmente el pago de intereses. La cuota cero de CajaMadrid, por ejemplo, da la opción de eximir del pago total de la cuota durante el primer año.
En las hipotecas crecientes, que ya no publicita el mercado, aunque desde Caja Madrid no confirman que hayan dejado de ofrecerlas, una cuota muy reducida se incrementa año a año a razón de un porcentaje anual que suele ser del 2 por ciento.
Y la de cuota fija, de esta misma entidad, repercute la subida del tipo de interés en el plazo y no la cuota, siendo éste de 25 años, como nivel de partida, y pudiéndose ampliar hasta un máximo de 40 años.