Empresas y finanzas

El euro trae estabilidad y prestigio pero también responsabilidad



    Zagreb, 7 dic (EFECOM).- Los eslovenos esperan que el ingreso en la zona euro de su país el 1 de enero de 2007 mejore sus perspectivas económicas y simplifique las transacciones con el exterior, pero reconocen que para prosperar deben proseguir con las reformas.

    "Eslovenia llegará a ser parte del círculo interior de los países desarrollados de la Unión Europea, lo que de por sí alzará su reputación y mejorará las oportunidades de la economía eslovena", aseguró recientemente el primer ministro, Janez Jansa.

    Opinó que mejorará la estabilidad de las finanzas públicas, que las transacciones económico-financieras serán simplificadas y que el primer día de 2007 entrará en vigor también un sistema fiscal simplificado que reducirá el costo del trabajo.

    Jansa expresó la convicción de que habrá un entorno más favorable para los negocios, que aumentará las posibilidades para unos resultados económicos aún mejores que los logrados al cumplir los criterios de Maastricht para entrar en la Unión Económica y Monetaria (EUM).

    Anunció reducciones del déficit presupuestario, "pero no a costa de los derechos y beneficios sociales, sino por medio de recortes de los gastos estatales".

    Apenas ingresó el 1 de mayo de 2004 en la UE, junto con otros 9 países, Eslovenia consideró óptima la introducción más rápida posible del euro, al evaluar que ello promovería el intercambio comercial y las inversiones, y reduciría los gastos de transacciones bancarias y la vulnerabilidad de la economía a choques externos.

    Las exportaciones ocupan en los últimos años las dos terceras partes del Producto Interior Bruto (PIB) y el euro es la divisa preponderante en el intercambio exterior, de modo que las empresas están acostumbradas a operar con el euro.

    "Para nosotros será un alivio no tener ya la carga de tener que realizar las transacciones en dos divisas", declaró Ivo Boscarol, propietario de una empresa de aeronaves ultraligeras "Pipistrel", que exporta a la UE el 55 por ciento de sus productos.

    Representantes de la compañía "Gorenje" de electrodomésticos esperan que el paso al euro traiga mayores inversiones extranjeras a Eslovenia y como muchos otros se alegran de la simplificación y la reducción de los costes de las transacciones.

    "A juzgar por las reacciones y los sondeos de la opinión pública, estamos abandonando algo bueno, para adoptar algo aún mejor", comentó el gobernador del Banco Esloveno, Mitja Gaspari, tras señalar que su país adopta el euro en condiciones de gran estabilidad económica.

    Según las previsiones, el déficit presupuestario bajará en 2007 al 1,6 por ciento del PIB y la deuda pública seguirá por debajo del 30 por ciento del PIB, la inflación se mantendrá en el 2,5 por ciento y el crecimiento económico por encima del 4 por ciento.

    Los analistas coinciden en que el "reto principal", tras entrar en la zona euro, será mantener unas finanzas públicas sostenibles.

    El economista Dusan Mramor advirtió de que para ello hay que hacer frente, sobre todo, a problemas como el envejecimiento de la población, la financiación municipal y de la infraestructura, para "no seguir el camino de Portugal", que al introducir el euro tuvo un crecimiento económico negativo y un elevado déficit de finanzas públicas.

    Jansa opinó que para evitar los problemas con los que han tropezado otros miembros de la eurozona, Eslovenia no debe aplazar la realización de las reformas.

    "A pesar de los logros en el plano macroeconómico, la competitividad de Eslovenia no ha progresado suficientemente. Si queremos impulsar el crecimiento económico y nuestro éxito en los mercados extranjeros, es imprescindible realizar las reformas estructurales que nos hemos propuesto", comentó Jansa.

    La reforma del sistema fiscal, que debería completarse en tres años, pretende modificar por completo el sector, con miras a aumentar el poder competidor de la Economía, la realización de los objetivos de Lisboa y el recorte de las cargas administrativas sobre el contribuyentes, según el ministro de Finanzas, Bajuk. EFECOM

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