MAPA y criadores Merino colaborarán diferenciación genética raza
Madrid, 5 dic (EFECOM).- El Ministerio de Agricultura y el presidente de la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Merino, Juan Antonio de Quintana, suscribieron hoy un Convenio de colaboración para la realización de un proyecto de diferenciación genética, a través de ADN, de los diferentes tipos de ganado ovino de la raza Merina.
El director general de Ganadería, Carlos Escribano, explicó que para la ejecución de este proyecto se contará con la participación del Laboratorio Central de Sanidad Animal de Algete, como laboratorio nacional de referencia para el genotipado de ovino y permitirá seleccionar las distintas líneas genéticas de esta raza y su resistencia al scrapie.
Destacó la importancia de trabajar en la mejora de la calidad genética y por ende de la productividad de las razas ganaderas porque con el nuevo régimen de ayudas es un avance importante para garantizar la permanencia del sector en la actividad ganadera.
De Quintana destacó el valor de la raza merina que representa el 20 por ciento del censo ovino nacional con 4,5 millones de cabezas merinas y la raza con mayor presencia a nivel mundial.
Añadió que la mitad del censo merino se encuentra en Extremadura y otro 25 por ciento en Andalucía, mientras que el resto se reparte entre Castilla La-Mancha, Castilla y León y en pequeña cantidad en Asturias.
Explicó que es una raza creada para dar lana y que tras años de evolución ha desarrollado aptitud cárnica de gran calidad y una leche aunque con baja productividad.
Resaltó que la carne de esta raza tiene en contra la tradición española de consumir el cordero lechal y las carnes de merino tardan más en adquirir grasa y se consumen a partir de los 2,5 meses, por lo que el precio de venta no se corresponde con la calidad que ofrecen.
De Quintana reclamó al Ministerio campañas de divulgación dirigidas a los consumidores para explicar los distintos tipos de razas ovinas y sus diferencias a la hora de consumirlas.
Señaló que actualmente la ganadería ovina goza de buena salud y no presenta problemas sanitarios y destacó que la lengua azul, que en los dos últimos años había dificultado la actividad ganadera limitando los movimientos no ha afectado este ejercicio.
Denunció las dificultades que tienen los ganaderos a la hora de cobrar las subvenciones para llevar su ganado selecto a las subastas, ya que tras el traspaso de competencias en el pago de estas subvenciones desde el Ministerio a la Junta de Extremadura los pagos se están retrasando casi un año.
Respecto al programa de selección de los mejores ejemplares primando su resistencia a las Encefalopatías Espongiformes Transmisibles (EET), permitirá en apenas dos años contar con sementales que compaginen esta resistencia con unas óptimas condiciones morfológicas y productivas que garanticen la mejora de la raza merina.EFECOM
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