Ferrovial: BAA tendrá que vender de Gatwick, Stansted y un aeropuerto escocés
El regulador británico de Competencia obliga a BAA, el gestor aeroportuario controlado por la española Ferrovial, a vender tres de sus aeropuertos. En concreto, los activos de los que tendrá que desprenderse BAA serán los londinenses Stansted y Gatwick, y otro en Escocia, que podrá ser el de Edimburgo o el de Glasgow.
En su decisión final, la Comisión de Competencia puntualiza que el gestor deberá vender estos tres aeropuertos, de los siete con los que cuenta la compañía, en un periodo de dos años. Eso sí, BAA tendrá que seguir un orden: primero Gatwick, luego Stansted, y por último, el escocés. En el informe se establece otra condición más, y es que la venta deberá realizarse a "compradores diferentes".
De no cumplir con el imperativo de Competencia británica en el plazo impuesto, la Comisión se reserva el derecho de nombrar un consejo independiente que lleve a cabo el proceso de desinversión.
Además de la venta de los tres aeropuertos, el regulador señala que BAA deberá mejorar las consultas con las aerolíneas en escocés de Aberdeen y recomienda a la autoridad de aviación civil de Reino Unido (CAA) a adoptar "acciones específicas" en Heathrow, donde considera que BAA "continuará teniendo un sustancial poder de mercado incluso después de vender Gatwick y Stansted.
"Hemos decidido que es el único camino para hacer frente adecuadamente al perjuicio para los pasajeros y aerolíneas por la total ausencia de competencia", señaló el presidente de la comisión encargada del caso, Christopher Clarke.
Según explicó, el organismo que dirige reconoce "que la utilización de este modo de nuestros poderes tendrá un impacto significativo en el negocio de BAA. Sin embargo, dada la naturaleza y la escala de los problemas de competencia que hemos encontrado, no hemos considerado que fueran suficientes medidas alternativas la venta de uno sólo de los aeropuertos de Londres o una mayor regulación", añadió.
Decisión "errónea"
Ante esta decisión, la filial de Ferrovial ha afirmado en un comunicado que ahora mismo no se pueden tomar esas medidas y manifestó que el análisis de las autoridades británicas es "erróneo". La compañía había pedido al regulador británico que pospusiera la orden de desivertir activos dada la actual situación económica y financiera.
La compañía señaló en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que estos "remedios" establecidos por la Comisión "pueden resultar inviables en las condiciones económicas actuales", aunque se compromete a evaluar "detenidamente" el informe de la Comisión "antes de emitir una respuesta".
Además, BAA acepta la necesidad de "un cambio", aunque precisa que ya está inmersa en este proceso tras haber iniciado la venta del aeropuerto de Gatwick, al que colgaron el cartel de se vende en 2008.
Este activo cuenta con tres pretendientes, que pueden presentar sus ofertas hasta el próximo mes de abril. Se trata del consorcio formado por Global Infraestructure Partners, sociedad de Credit Suisse y General Electric; el constituido por el fondo de infraestructuras de Citi, el aeropuerto de Canadá y John Hancock Life Insurance; y el que engloba al el aeropuerto de Manchester y el fondo canadiense de infaestructuras Borealis.