Gana 423 millones de euros menos en los nueve primeros meses del año y su cartera de pedidos cae un 7 por cientoMADRID. EADS comienza a pagar muy caro el retraso del programa A380, el avión comercial más grande del mundo con capacidad para 555 pasajeros. El beneficio del gigante aeronáutico durante los nueve primeros meses del año cayó un 33 por ciento, hasta 848 millones de euros. O lo que es lo mismo: la compañía ganó 423 millones de euros menos.Pero el peor síntoma para el grupo aeronáutico es que su cartera de pedidos ha caído de enero a septiembre un siete por ciento, hasta los 236.524 millones de euros, algo que no ocurría desde hacía bastante tiempo. La cifra todavía es más preocupante si sólo se miran los contratos firmados en lo que va de año. De 38.800 millones de euros en los nueve primeros meses a los 25.700 millones de euros. Además, el descenso podría haber sido mayor si no fuera por el incremento de encargos de la filial de defensa.El retraso lo complica todoLa compañía explica que la reestructuración del plan de entregas del A380, que se han retrasado en más de un año desde la fecha inicial, ha frenado el récord de entregas de Airbus. La empresa sólo ha servido 320 aviones en los nueve primeros meses y espera terminar el año con 430 unidades. EADS reconoce que el problema del A380 ya le ha supuesto un sobre coste de 1.000 millones de euros.Por su parte, la división de aviones de transporte militar, que engloba en negocio de la antigua empresa española Casa (Construcciones Aeronáuticas), ha conseguido triplicar sus ingresos, que han pasado de 504 millones de euros en los tres primeros trimestres de 2005 a 1.699 millones de euros en el presente ejercicio. La buena marcha de los resultados se debe al comienzo de la producción del avión de transporte militar A400M, que se comenzará a ensamblar en Sevilla el año que viene.EADS también está realizando una auditoría para comprobar la viabilidad del programa A400M y evitar que surjan problemas similares a los del proyecto A380. El único pero del negocio dirigido por el español Francisco Fernández Sainz es que la cartera de pedidos ha disminuido levemente desde los 21.000 millones de euros contratados en 2005 hasta los actuales 20.100 millones de euros.Pese a la caída del beneficio en EADS, las acciones subieron ayer un 2,5 por ciento, hasta 21,31 euros.