A la par, el banco se compromete a invertir 13.000 millones en tecnología hasta 2022El consejero delegado de Deutsche Bank, Christian Sewing, dio ayer la cara ante sus empleados y los analistas tras conocerse el pasado domingo la intención de la entidad alemana de ajustar 18.000 puestos de trabajo de cara a tres años, lo que supone un recorte del 20 por ciento de la plantilla. Sewing aseguró que el banco ha acelerado su transformación con el objetivo de incrementar la rentabilidad del mismo. La entidad persigue obtener un ROTE (ratio que mide la rentabilidad) del 8 por ciento para 2022. Hasta el momento, el objetivo de Deutsche Bank era cerrar el año 2019 con un ROTE del 4 por ciento, una meta que los analistas veían poco ambiciosa frente al 8 y el 13 por ciento que prevén sus competidores, según datos de Bloomberg.Entre los objetivos del ajuste de plantilla del banco que lidera Sewing está aligerar los gastos del banco. Deutsche Bank prevé reducir un 26 por ciento los costes, hasta situarlos en 17.000 millones de euros a tres años. Hace poco más de un año, en mayo de 2018, la entidad ya anunció salidas de 7.000 empleados para dejar los gastos por debajo de los 23.000 millones, cifra en la que se sitúan en la actualidad. Plan de digitalizaciónAsimismo, el consejero delegado de la entidad alemana aseguró ayer en una carta a sus empleados que, a la par que el banco se propone ajustar los gastos, también se ha marcado la meta de invertir 13.000 millones de euros en digitalizarse, también de cara a 2022.Asimismo, el banco también pretender descargar el balance de 74.000 millones de activos ponderados por riesgos (APR) al traspasarlos a la que han bautizado Unidad de Liberación de Capital, similar a un banco malo. No obstante, Sewing destacó que estos activos son de "alta calidad" por lo que confía en que se liquiden con rapidez, ayudando a liberar cantidades significas de capitales, especialmente destinadas a provisionar estos activos. "Como resultado, tenemos la intención de devolver 5.000 millones de euros a los accionistas a partir de 2022", dijo el consejero delegado. En este punto, remarcó que Deutsche Bank no está pidiendo a los accionistas "que paguen por esta transformación" sino que la entidad "planea devolverles el capital". Por otro lado, el banco reducirá el negocio de banca de inversión, que será "más pequeño, pero más estable", según el consejero delegado. Sewing se mostró optimista y convencido de la fortaleza de cuatro áreas de negocio en las que se van a centrar. Deutsche Bank concentrará su actividad en la banca comercial y para empresas, la minorista y para pymes, algunas áreas de la banca de inversión y en la gestión de activos.Deutsche Bank cerró ayer la jornada con una caída del 5,39 por ciento, hasta los 6,79 euros por título frente a los 7,18 euros con los que cerró el viernes.