EDP ha puesto en marcha la operacion de venta de 2.000 MW de energía hidráulica en Portugal. La operación, incluida dentro del plan de rotación de activos lanzado por la eléctrica lusa dentro de su estrategia, ha despertado el interés de un buen grupo de compañías y fondos de infraestructuras.Entre los interesados en hacerse con este tipo de centrales figuran en un lugar destacado el fondo canadiense Brookfield, que acaba de tomar el 50 por ciento de X-Elio por casi 480 millones de euros, o Macquarie -dueño de Viesgo-, pero también han puesto su foco en esta operación compañías como Endesa, Iberdrola o Engie por el tamaño de la misma y el tipo de activo.Tanto Endesa como Iberdrola cuentan con una amplia trayectoria en el país y unos activos de este tipo les permitirían dar un importante salto en su capacidad de generación en la zona.La operación se espera que pueda recibir las primeras ofertas iniciales a finales de este mismo mes con la intención de que pueda cerrarse la venta antes de acabar el año.EDP prevé deshacerse de 6.000 millones de euros en activos y para ello ha llevado a cabo un ejercicio profundo de revisión de la cartera de activos en el que se incluyen ventas de activos de generación en la Península por cerca de 2.000 millones de euros.Elliott Management planteó también en su día a EDP la venta de una participación del 49 por ciento en su red de distribución eléctrica en Iberia, así como de sus centrales de carbón en Portugal y España, para centrarse en invertir en el negocio de las renovables, con el fin de convertirse en un "líder mundial en este mercado" y en uno de los mayores generadores de energía verde de Europa. La compañía, por el momento, ha suscrito una alianza con Engie para acelerar e incrementar su crecimiento en el área de la eólica marina y mantendrá su plan de rotación de activos.