La Unión de Empresas Siderúrgicas reclama un compromiso al Gobierno para alcanzar el objetivo de llegar al 20% del PIBLa Unión de Empresas Siderúrgicas (Unesid) reclamó ayer al Gobierno un claro compromiso con la industria española, a la vez que confió en que el nuevo Ejecutivo ponga en marcha las medidas comprometidas para el logro de un precio competitivo de la energía eléctrica y una nueva regulación del gas que favorezca la actividad industrial en España. Bernardo Velázquez, presidente de la patronal de la siderurgia y consejero delegado de Acerinox, destacó que el precio de la energía se ha notado no solo en los casos de Alcoa y Arcelor Mittal, "sino que la pérdida de competitividad por el precio de la energía afecta a todo el sector siderúrgico y metalúrgico. Velázquez reclamó que si se quiere" llegar al objetivo mediante el cual la industria suponga el 20 por ciento del PIB, hay que tener un precio tan competitivo, como Francia o Alemania", afirmó.En un año 2018 marcado por los conflictos comerciales en torno a los productos siderúrgicos, en España, según Unesid, a pesar de las medidas de salvaguardia adoptadas por la UE, las importaciones de acero aumentaron un 9 por ciento, con una subida del 21 por ciento en las procedentes fuera de la UE, y de un 52 por ciento en las de Turquía. En cambio, la actividad de la industria española se mantuvo estable, que apenas supuso un descenso del 1 por ciento. Con esta combinación de importaciones y actividad nacional, el consumo aparente de acero en España se elevó un 12 por ciento hasta 14,5 millones de toneladas, según la patronal.En la industria española se notó en 2018 la debilidad de la economía mundial, lo que hizo que las exportaciones disminuyeran un 12 por ciento, especialmente en las que se marcharon fuera de la UE, que cayeron un 18 por ciento. Respecto a 2019, el sector siderúrgico español se mantiene estable, según la patronal, con un ligero repunte de la producción y un descenso en las exportaciones. La industria siderúrgica española recordó que es la primera en reciclaje, reconociéndose como un factor fundamental en la nueva economía verde, con unos 11 millones de toneladas recicladas cada año, realizando un uso eficiente de los recursos hasta aprovechar casi el 80 por ciento de los residuos que genera el proceso.