El grupo eleva la contratación un 8%, hasta 1.507 millonesAbengoa perdió 1.498 millones de euros en 2018 como consecuencia del efecto de incluir la deuda New Money 2 y Old Money a valor de reembolso, tal y como exige la normativa contable raíz de la firma del contrato de bloqueo (lock up) para poder sacar adelante la reestructuración de su deuda. Este impacto será revertido al finalizar la reestructuración financiera y la deuda volverá a registrarse a valor razonable, según explicó ayer la compañía andaluza. Los números rojos registrados, que están compensados parcialmente por la venta de la participación en Atlantica Yield a Algonquin, contrastan con los 4.278 millones que Abengoa ganó en 2017 por el efecto de la reestructuración de la deuda firmada en marzo de aquel año. En este contexto, los resultados operativos registran cifras dispares. En el lado positivo, el resultado bruto de explotación (ebitda) creció un 48 por ciento, hasta alcanzar los 188 millones de euros. Un aumento que la ingeniería sevillana atribuye a la mayor rentabilidad en ciertos proyectos, la reducción de gastos generales, que bajaron de 125 millones a 77 millones, y menores ajustes por gastos de asesores relacionados con el proceso de reestructuración financiera, que en 2018 sumaron 28 millones en comparación con 52 millones de euros en 2017. Todas estas medidas permitieron amortiguar la caída de las ventas, que se situaron un 1.303 millones, un 12 por ciento menos que las alcanzadas en 2017. En este caso, la reducción, justificó Abengoa, se debe a la finalización de algunos proyectos, así como al retraso en el inicio de proyectos contratados a finales de 2017 y principios de 2018. Es de esperar que la evolución de los ingresos sea positiva en los próximos trimestres, gracias a la contratación conseguida en el último año y a la expectativa de que con la reestructuración financiera y la liberación de avales pueda concurrir a más concursos con garantías. En 2018, el volumen de adjudicaciones ascendió a 1.507 millones, un 8 por ciento más que los 1.395 millones del ejercicio precedente. Así, se anotó nuevos proyectos en Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Chile, España, Reino Unido, México y Perú, entre otros. La cartera de ingeniería y construcción se situó en 1.775 millones de euros, un 24,6 por ciento más. Mientras, la deuda financiera bruta se elevó un 3,3 por ciento, hasta 5.656 millones de euros.