El Consejo de Administración de BAA considera insuficiente la oferta económica MADRID. Ayer, a las 11,54 de la mañana (hora británica), una noticia desató una ola de nerviosismo por los despachos de Ferrovial: todo el mundo conocía las principales condiciones de la oferta que quiere lanzar sobre BAA, la mayor compañía de aeropuertos del mundo.El culpable de esta filtración fue el mismísimo Consejo de Administración del grupo británico, que envió un comunicado a la Bolsa de Londres donde destapaba el secreto mejor guardado de Ferrovial: los 12.648 millones de euros que está dispuesta a pagar por el grupo de aeropuertos. Para colmo, añadía que rechazaba la oferta. ¿La razón? Le parece demasiado baja.Cuestión de precioUnos 40 minutos después, la constructora española envió otro comunicado a la Bolsa de Londres, donde reconocía sentirse "decepcionada ante la decisión de BAA de rechazar la propuesta sin discutirla en profundidad". Un desencanto que ampliaba a sus socios en la operación, Caisse de Depôt et Placement du Québec y GIC, sociedad de inversión del Gobierno de Singapur. Juntos han creado el consocio Bidco, donde Ferrovial ostenta el 60 por cientoAunque los británicos intentaron calmar las aguas, alegando que es habitual en el Reino Unido publicar las condiciones de una opa, en España esta postura se interpretó como el inicio de las hostilidades. Además, rompió los esquemas a Ferrovial, que se había dirigido a BAA con la intención de llegar a un acuerdo e, incluso, estaba dispuesta a subir su oferta si los administradores británicos daban el visto bueno a la operación y le permitían hacer una auditoría sobre los activos.Pero el acuerdo ha sido imposible. Los 810 peniques (11,17 euros) por acción que ofrece Ferrovial están muy lejos de los 900 peniques que quiere Scottish Widows, principal accionista de BAA. Incluso, se ha barajado el listón de 950 peniques como marca necesaria para recibir el visto bueno.En su defensa, Ferrovial alega que ofrece un 27 por ciento más que el precio medio de cotización de BAA durante el mes anterior al 6 de febrero, cuando anunció su interés por opar a la británica. Respecto a los últimos doce meses, el precio es un 32 por ciento superior. Además, la constructora asegura que mantendrá todos los activos de la británica. Si necesitara liquidez, vendería sus propios bienes.