Las acciones de clase B de Abengoa perdieron ayer el 62 por ciento de su valor con la entrada en vigor del nuevo umbral mínimo de cotización en el mercado español, situado en 0,0001 euros, frente a los 0,01 euros anteriores. Esta medida, que pretende dar mayor liquidez al Mercado Continuo y evitar que las acciones de pequeñas compañías queden bloqueadas, sacudió con fuerza los títulos de Abengoa, como también lo hizo con los de Urbas (un 62 por ciento) y Vértice 360, (23 por ciento). Abengoa convocó el pasado 2 de octubre una junta extraordinaria de accionistas para someter a consulta las propuesta de desdoblamiento de la acción, promovida sin éxito por un grupo de inversores, liderado por Inversión Corporativa, de la familia Benjumea. De hecho, las acciones de la empresa cotizan planas, desde el pasado 1 de junio, de forma prácticamente consecutiva. Al contrario de Abengoa y Urbas, las acciones de Duro Felguera -tras sufrir unas caídas iniciales del 26 por ciento-, remontaron durante la jornada y terminaron la sesión con un ascenso del 18 por ciento en 0,012 euros.